Luego de que en Tamaulipas una maestra, identificada como Ahisury Wallali “N”, fuera señalada por publicar una fotografía en su cuenta de Instagram donde aparece un niño al que colocó cinta adhesiva en la boca “porque no se callaba”, ha sido vinculada a proceso por la Procuraduría General de Justicia del estado.

 

Después de los hechos, la mujer fue nombrada en redes sociales como #LadyTape, y tras que la imagen llegara a manos de las autoridades ha sido acusada por abuso de autoridad y discriminación contra el menor del edad.

 

Como medida cautelar, se establecieron cuatro meses de prisión a la responsable.

 

Por su parte, mediante un comunicado la Procuraduria ha reiterado su “compromiso de no permitir la impunidad de aquellas conductas que agravien a particulares o a la sociedad realizada en el desempeño o con motivo de funciones públicas, ni las que atenten contra la dignidad de los tamaulipecos, especialmente de los menores de edad”.

 

GAC