Una estudiante de la Academia Da Vinci Charter habría dado a comer a sus compañeros galletas hechas con las cenizas de su abuela.
De acuerdo con los testimonios de una familia de Davis, California, la joven habría contado el hecho a uno de sus compañeros, miembro de la familia denunciante.
Las autoridades de la escuela al recibir parte de lo sucedido, obligaron al menor a firmar su testimonio y le indicaron que no podía contar lo ocurrido a nadie.
Los parientes del joven aseguraron que los responsables del colegio no han avisado a los demás padres de familia sobre los hechos.
El padre del menor afirmó que "parecen estar un poco más preocupados por protegerse a sí mismos que a sus estudiantes".
El distrito escolar ha emitido un comunicado en el que aseguran que "la seguridad física y socioemocional de sus estudiantes es su principal prioridad", además señalan que "cuando averiguan que alguien ha obrado de mala manera" toman las medidas disciplinarias correspondientes.
Con información de RT
fahl
