A diferencia de la elección presidencial, en la capital del país las izquierdas mantienen una estrategia dilatoria para que su abanderado, Miguel Ángel Mancera, salga bien librado del último debate oficial entre aspirantes a gobernar la capital del país.

 

Pese a que Mancera asegura que participará en un debate flexible, sus representantes ante el Instituto Electoral del Distrito Federal (IEDF), Julio César Moreno y Miguel Ángel Vázquez, han retrasado la aprobación del formato a cuatro días del encuentro y buscan que el formato sea rígido para evitar exponer al ex procurador capitalino, quien tiene una ventaja de casi 40 puntos en las encuestas sobre sus oponentes del PAN, Isabel Miranda de Wallace y de PRI-PVEM, Beatriz Paredes.

 

Tras un encuentro con empresarios, Mancera señaló que se ha retrasado la definición del formato no por su oposición, sino porque el PAN no acreditó la personalidad de Juan Dueñas como representante de Wallace.

 

“¿Por qué no se han puesto de acuerdo?, lo desconozco, la única noticia que tuve es que una de las personas que decía ser representante no tenía acreditada su personalidad y no se pudo cerrar el acta ayer”, precisó.

 

El pasado lunes, los representantes de los siete partidos, los cuatro candidatos al GDF  y dos consejeros electorales del DF se reunieron a discutir el formato y con el propósito de cerrar el acta, pero Vázquez y Moreno rechazaron tomar un acuerdo ante la presencia del dirigente local de PAN, Juan Dueñas.

 

A decir de la oposición, los representantes de Mancera buscan un formato rígido, de pares, para que la mitad del tiempo Mancera no aparezca.

 

Además, se acordó en el Día del Padre, lo cual le beneficia a Mancera al ser padre de familia y garantiza una fecha con poca audiencia en televisión.

 

Pese a ello, Mancera señaló que él estará bajo el formato y los temas que se plateen y acuerden en consenso todos los partidos y candidatos.

 

“A mí cuando me dijeron que era el día 17, pues yo lo primero que dije: Bueno, pues es el Día del Padre, pero adelante, así se planteó; ahí estaremos, habrá que sumar los tiempos para convivencia, pero también para estar ahí en el debate; vamos a llegar puntuales”.

 

En cuanto a la posibilidad de que el debate no sea difundido ampliamente, el abanderado de las izquierdas, dijo: “Yo espero que la gente esté interesada de lo que se va a decir ahí, de lo que se va a plantear; nosotros vamos a ir con el mismo ánimo, con las mismas ganas”.

 

Mancera declaró que lo importante es estar en contacto con la ciudadanía, pero si el debate se quiere utilizar para agredir, es estrategia de cada uno de los candidatos.

 

“Cada quien en sus estrategias, a mí lo que me importa es continuar con la propuesta y continuar con esto, como lo que vimos hoy: los temas especializados y los temas que sí le van a dar un avance a la Ciudad de México”.

 

En su actividad proselitista, Mancera señaló que en su gobierno habrá una ciudad digital. LUIS VELÁZQUEZ