Roger Federer llegó a siete triunfos en el año en canchas bajo techo y a 17 victorias al hilo en Basilea luego de superar al alemán Struff en los octavos del Swiss Basel. El primer cabeza de serie prevaleció con parciales de 6-3, 7-5 en una hora y siete minutos para extender su dominio en su patria.
Ya son 12 clasificaciones seguidas a cuartos en Basilea y 16 en total en un evento en el que está participando por 18ª ocasión. Hace precisamente 20 años debutó aquí, con una derrota en primera ronda ante el norteamericano Andre Agassi. Y su éxito ante su gente ha sido rotundo: con ocho coronas, tres de ellas en las últimas tres ediciones, y con once clasificaciones seguidas a la final.
Y este jueves demostró que es candidato a todo una vez más. Aunque no salvó la única oportunidad de ruptura que enfrentó en el partido, el suizo de 37 años, concretó las tres que tuvo al resto para dejar en 4-0 su historial con el alemán que venía de vencer en primera ronda a John Millman, el verdugo de Federer en cuarta ronda del US Open.
“Estaba listo para enfrentar a Struff. No sabía qué tan agresivo iba a jugar ni cuánto servicio y volea iba a hacer. Pero desafortunadamente, no tuve los mejores dos primeros juegos de servicio. Él también jugó bien, debo decir. Se conectó bien, salió con un plan y funcionó para él”, dijo Federer, que ahora tiene récord de 10-0 en sets ante Struff. “En el segundo set estuvo cerca todo el tiempo, pero creo que pude limpiar un poco mi juego… obviamente estoy feliz de haberlo superado”.