El secretario de Energía de Estados Unidos, Rick Perry, aseguró hoy que Rusia utiliza la energía como “arma” y “fuente de presión” en su política exterior.
“Rusia en la historia siempre usó la energía como un instrumento de presión, como un arma. Esto lamentablemente hoy también es así”, dijo Perry ante la prensa en Budapest, tras reunirse con el ministro húngaro de Asuntos y Comercio Exteriores, Péter Szijjártó.
Perry recordó los cortes unilaterales del suministro de gas ruso hacia Ucrania en 2009 y 2014, lo que causó problemas en toda Europa.
En su opinión, “no se debería dejar que Rusia use de nuevo la energía como arma. La solución es la diversificación de las fuentes (energéticas)”.
Por otra parte, recordó que Estados Unidos considera que los gasoductos rusos Nord Stream (en el mar Báltico) y Turkstream (en el Negro) “sirven para desestabilizar a Europa”.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, propone desde hace tiempo vender a los países europeos su propio gas licuado, en lugar del gas ruso.
En cuanto a las sanciones contra Rusia por la anexión de la península ucraniana de Crimea en 2014, Perry destacó la legitimidad de las medidas europeas y estadounidenses a Moscú.
“Es muy sencillo. Hay que respetar el Estado de derecho. Rusia no lo hace, así que nuestro presidente y Estados Unidos aplican sanciones absolutamente legitimas”, subrayó.
TFA