El príncipe heredero y ministro del Interior de Arabia Saudí durante casi cuatro décadas, Nayef bin Abdelaziz, falleció hoy a los 78 años a causa de una enfermedad, lo que deja abierta la línea sucesoria al trono de este país.
Un escueto comunicado de la Casa Real saudí explicó que el príncipe Nayef, que era también viceprimer ministro, murió “fuera del país”, donde estaba siendo tratado de una enfermedad, sin dar más detalles.
El diario saudí “Al Riad” especificó que el heredero al trono falleció en su residencia en Ginebra (Suiza), está previsto que mañana, domingo, se celebre “una oración por su alma” en la Gran Mezquita de la ciudad santa de La Meca, según la nota.
Tras su deceso, analistas y observadores saudíes señalan como principal favorito a sucederle como príncipe heredero a su hermano Salman, ministro de Defensa desde noviembre de 2011.
Un experto consultado por Efe, que pidió el anonimato, destacó que el príncipe Salman, nacido en 1935, tiene “gran influencia y poder” entre sus hermanos y es posible que mantenga el Ministerio de Defensa si es designado heredero al trono.
A partir de hoy, comienza un plazo de treinta días para elegir un nuevo heredero al trono, según el artículo 9 del reglamento de la llamada comisión del “Baiya” (fidelidad), ante la que el rey saudí, Abdalá bin Abdelaziz, tendrá que presentar un candidato. La Ley Básica saudí, adoptada en 1992, declara que los reyes de ese país, fundado en 1933, deben ser descendientes de Abdelaziz al Saud y que las normas fundamentales -en un Estado sin Constitución- se basan en la “sharía” (ley islámica).
Obama lamenta la muerte del príncipe Nayef bin Abdelaziz
El presidente de EU., Barack Obama, lamentó la muerte del príncipe heredero de Arabia Saudí, Nayef bin Abdelaziz, un “eficaz aliado” en la lucha antiterrorista, en un pésame al que se sumó su secretaria de Estado, Hillary Clinton.
En un comunicado, Obama recordó que el príncipe heredero, fallecido hoy a los 78 años en la ciudad suiza de Ginebra, fue “durante décadas” ministro de Interior del país y “se dedicó a la seguridad de Arabia Saudí y de toda la región”.
“Bajo su liderazgo, Estados Unidos y Arabia Saudí desarrollaron una alianza sólida y eficaz en la lucha contra el terrorismo, que ha salvado incontables vidas estadounidenses y saudíes”, señaló el mandatario.
“En el nombre del pueblo estadounidense, quiero ofrecer mis más profundas condolencias al rey Abdalá, a la familia real, y al pueblo saudí”, indicó Obama, que subrayó su “gran pesar” por el suceso.
El presidente recordó el “histórico encuentro” de 1945 entre el padre de Nayef, el fallecido rey Abdelaziz Al Saud, y el expresidente estadounidense Franklin D. Roosevelt, que sentó las bases de “una amplia alianza entre los dos países” que el príncipe heredero “apoyaba enormemente”.
Por su parte, Hillary Clinton se mostró “profundamente entristecida” por la muerte de quien definió como “un aliado clave y valorado para Estados Unidos, y un líder dedicado y valiente para Arabia Saudí”.
“Dedicó su vida a la seguridad de Arabia Saudí y su lucha contra el extremismo”, aseguró la titular de Exteriores. “Personalmente, echaré de menos al príncipe heredero Nayef y su rol decisivo en la mejora de la relación bilateral entre Estados Unidos y el reino de Arabia Saudí”.