Las infecciones nosocomiales afectan a 15% de los pacientes hospitalizados por más de 48 horas y la mitad de ellas están asociadas con el uso inadecuado de catéteres. Por ello, la Secretaría de Salud establecerá la Clínica de Catéteres, cuyo objetivo es reducir el número de contagios por esta vía.

 

Durante la Reunión Ordinaria de la Comisión Nacional de Enfermería que organizó  dependencia, se informó que actualmente existen 135 clínicas de este tipo en hospitales de segundo y tercer nivel de todo el territorio nacional.

 

El objetivo es que haya por lo menos cinco de ellas en cada una de las entidades, indicó Juana Jiménez Sánchez, coordinadora general de la Comisión Permanente de Enfermería.

 

Además, en los próximos días se publicará la Norma Oficial Mexicana (NOM) 022-SSA3- 2007, que establece los criterios de carácter obligatorio para el manejo de catéteres y otros instrumentos invasivos para el paciente, a fin de reducir el riesgo de infección.

 

Esta norma funciona como un proyecto desde que fue publicada en octubre de 2010. Será hasta este año cuando adquiera su carácter oficial y sea obligatoria para todos los prestadores de servicios médicos.

 

De acuerdo con diversos estudios internacionales, las infecciones dentro de los hospitales se pueden prevenir si el personal se lava las manos correctamente antes de intervenir al paciente, usa guantes y cubre bocas, abre el material esterilizado y lo coloca de forma adecuada, y se lava las manos después de atender a cada enfermo.

 

Además, el personal debe aprender a manejar máquinas e instrumentos de última tecnología, como catéteres, máquinas respiratorias y sondas, que requieren un medio totalmente aséptico

 

Aunque los estándares permitidos por la misma Secretaría de Salud no deben rebasar 5% de los pacientes, el número de estas infecciones es tres veces más alto. Incluso, en las Unidades de Cuidados Intensivos (UCI) se elevan hasta 23%, reporta el informe de Medición de la Prevalencia de Infecciones Nosocomiales, elaborado por la dependencia.

 

Las más comunes son la infección asociada al catéter, neumonía, infección urinaria, problemas en la herida quirúrgica e infección en el torrente sanguíneo.

 

Todas ellas son responsables de 25% de las muertes dentro de los hospitales, aunque no necesariamente en ese orden. La primera causa de muerte es la septicemia o infección en la sangre. En segundo lugar está la neumonía, después por las heridas de cirugía y finalmente, las infecciones en las vías urinarias.

 

Sin embargo, es difícil conocer el número y las causas exactas de los fallecimientos. Alejandro Macías, jefe del área de control de infecciones del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán, explicó que “en el certificado de defunción no aparece la infección como la causa de muerte”.

 

La Organización Mundial de la Salud indica que la atención de estas enfermedades utiliza 70% del presupuesto anual del sector salud mexicano.