Una de las citas más importantes para el Wolverhampton en esta temporada se dio en su casa: Molineaux. Apenas iniciado el año, el equipo recién ascendido tuvo la nada fácil encomienda de enfrentarse al Liverpool, actual líder de la Premier League y que hace apenas unos días tuvo la primera derrota en el campeonato inglés.
Un todopoderoso ante un humilde nuevamente se suscitó en la grama. Ahí donde muchas de las grandes historias del futbol se llevan a cabo. Ayer, el equipo del mexicano Raúl Jiménez escribió un nuevo pasaje en el libro de las proezas del balompié con un triunfo trabajado y merecido.
El encuentro se mantuvo con amenazas al ataque sin llegar a concretarse durante los primeros 30 minutos. Se metió la pierna con autoridad en varios momentos que ameritaron una advertencia por parte del central como en el caso de James Milner quien vio el cartón amarillo al minuto 15.
Los Reds eran dominadores del esférico por grandes lapsos y cuando se alistaban para realizar un nuevo embate, los atacantes del Wolverhampton se conjuntaron para dar la el primer golpe con un certero contraataque.
Cuando los porteños transitaban el balón por el medio campo, Milner no controló de manera correcta y fue Diogo Jota quien aprovechó ese momento para robarle el balón y asistir a Jiménez apenas pasando la mitad de cancha.
Jiménez condujo el esférico sin obstáculos en su camino hasta el área chica de Mignolet, a quien fusiló con la diestra y mandó el balón al fondo de las redes. Los asistentes al Molineaux estallaron.
La respuesta del Liverpool llegó en los primeros minutos del segundo tiempo. Al minuto 51, Origi concluyó una jugada que tras una serie de rebotes, tomó en el borde del área grande y sacó un potente disparo con la pierna derecha que sorprendió a Ruddy. El meta de los lobos no pudo hacer nada y el juego se empató.
Pero los de casa no se quedaron tranquilos y apenas cuatro minutos después del empate, Ruben Neves le puso su rúbrica al segundo gol del Wolverhampton. Este cayó tras una jugada que rondó el área de los Reds y que el portugués probó desde fuera de la misma. Mignolet colaboró al no atajar correctamente el balón y este terminó en el arco.
Para el resto del partido, el Liverpool intentó sin fortuna. La defensa del Woverhampton no le permitió concretar el empate. La jugada más clara fue un tiro libre que cobró Shaquiri, pero el arquero Ruddy alcanzó a desviar el balón para que se estrellara en el poste y saliera.
Si bien el Liverpool sólo contó con cuatro titulares habituales en el campo, no se podía dar el lujo de ser eliminado en rondas tempranas de la FA Cup. Por su parte el Wolverhampton continúa sorprendiendo esta temporada a toda la Liga.
RIVAL GOLES ASISTENCIAS
Tottenham 2 1
Liverpool 1 0
Chelsea 1 0
M. United 0 1
Arsenal 0 1
LEG