La caravana migrante 2019 pasó su segunda noche en el albergue provisional ubicado en el estadio Jesús Martínez “Palillo”, en la alcaldía de Iztacalco, la cual tiene como destino los Estados Unidos.
Personal de la Secretaría de Marina-Armada de México es el encargado de preparar y repartir los alimentos a los más de dos mil migrantes centroamericanos, algunos de los cuales arribaron la madrugada de este lunes y se fueron sumando a lo largo de todo el día.
El albergue instalado dentro del deportivo cuenta con un espacio de comedor donde los migrantes, en su mayoría procedentes de Honduras, El Salvador y Guatemala, se reúnen y conviven amenamente.
Así, en completo orden, las personas avanzan para que se les proporcione el desayuno que en este día consistió en papas con huevo, frijoles, tortillas y café.
Mientras, más de 160 elementos de seguridad resguardan tanto al interior como al exterior del lugar. Además, se encuentra personal del DIF Nacional, Secretaría de Salud, Protección Civil federal y del Instituto Nacional de Migración (INM).
Los migrantes que ingresan al albergue, cuya capacidad es de dos mil 500 personas, deberán ajustarse al protocolo como es no fumar o consumir alguna bebida alcohólica, escuchar música con volumen bajo, no comer en el lugar ni portar navajas.
Además, deberán portar en todo momento la pulsera color verde que se les colocó en la mano derecha, misma que deberán mostrar a su ingreso al albergue.
El objetivo es atender, a través de los tres niveles de gobierno y como un solo equipo, a los movimientos migratorios y verificar observancia a sus derechos humanos, indicó el Coordinador Nacional de Protección Civil, David León Romero.
Se busca, comentó, una migración regular, ordenada y segura, “tratando de brindarles condiciones mínimas de bienestar a los migrantes que llegan a nuestro país”.
jhs