El fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) informó que 45% de los niños del mundo vive en pobreza y que solo una tercera parte de los niños cuenta con una protección social que les permita crecer y desarrollarse gozando de sus derechos elementales.
En un informe conjunto, la Unicef y la Organización Internacional del Trabajo (OIT), destacaron la importancia del bienestar de los niños más allá de los beneficios que supone a nivel individual, ya que afirman que una infancia protegida es vital para el desarrollo de un país a corto y largo plazo.
El estudio sostiene que los sistemas de protección social son la herramienta adecuada para abordar la pobreza y la vulnerabilidad económico-social de los menores.
La Declaración Universal de los Derechos Humanos y la Convención de los Derechos del Niño establecen claramente el derecho a la protección social y la Agenda 2030 la incluye en el primero de los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
En Europa y Asia Central el 87% de los menores están protegidos. En América, el porcentaje se reduce a 66%, en Asia y el Pacífico se ubica en 28% y en África a 16%.
Pese a las cifras, el informe resalta una tendencia positiva que han registrado en los últimos años los programas de transferencias de efectivo que impactan directamente en la alimentación, salud y educación de los niños.
Lamenta, por otro lado, que muchas naciones todavía tengan programas muy limitados de protección a los menores, con beneficios inadecuados e instituciones fragmentadas y débiles.
La publicación reconoce un aumento del gasto y la inversión en medidas de protección social para los niños, pero advierte que hace falta un mayor avance en ese terreno.
La OIT y UNICEF reportan que las políticas de consolidación fiscal que tienen lugar en algunos países implican una reducción en los beneficios para los niños y las familias, por lo que piden mayores esfuerzos para que los ajustes fiscales no arruinen el terreno ganado.
Para avanzar hacia la protección social de la infancia, Unicef y OIT recomiendan expandir rápidamente los beneficios para los niños y las familias, incluyendo el otorgamiento de ayudas monetarias universales a los menores como un instrumento práctico para avanzar hacia la cobertura universal.
jhs