Foto: Reuters La Organización Mundial de la Salud advirtió este martes desde Ginebra del riesgo “extremadamente alto” de que se produzcan enfermedades diarreicas como el cólera  

La Organización de Naciones Unidas (ONU) solicitó 282 millones de dólares a la comunidad internacional para cubrir las necesidades que padecen los habitantes de las tres naciones africanas tras el paso del ciclón Idai, que dejó más de 700 muertos y tres millones de afectados.

 

“Mozambique, Zimbabwe y Malawi han sufrido una de las peores catástrofes meteorológicas de la historia de África”, afirmó el secretario general de la (ONU) Antonio Gueterres, al tiempo que realizó un recuento de la devastación causada por el ciclón Idai que azotó a las tres naciones africanas el pasado 14 de marzo.

 

Confirmó que el meteoro causó más de 700 muertos, cientos de desaparecidos, el número de afectados es de tres millones, casi dos terceras partes de ellos en Mozambique; además un millón de niños necesitan ayuda urgente y los daños en las infraestructuras son de unos mil millones de dólares.

 

“Todos hemos visto las desgarradoras imágenes: aguas bravas; gente varada en los tejados; escuelas, hospitales y casas en ruinas; una ciudad entera, Beira, prácticamente arrasada; y, en vísperas de la próxima cosecha, se inundaron enormes extensiones de tierras de cultivo en Mozambique”, refirió.

 

Señaló que obtener insumos básicos es escasa o alcanza precios inasequibles; también advirtió que el paso del ciclón y el creciente número de víctimas mortales son “otra señal de alarma sobre los peligros del cambio climático” y que los países vulnerables como Mozambique, serán los más afectados a menos que todas las naciones del mundo tomen medidas urgentes en el asunto.

 

Guterres apuntó que los equipos de emergencia de la ONU distribuyen ayuda humanitaria en condiciones extremadamente difíciles desde que se inició la crisis.

 

“Hemos lanzado por vía aérea paquetes de emergencia que contienen alimentos, medicinas, equipos de purificación de agua y proporcionado refugio para las comunidades que todavía están atrapadas por la inundación”. Hemos distribuido ayuda alimentaria a unas cien mil personas, destacó.

 

“Pido a la comunidad internacional que financie estos llamados rápidamente y en su totalidad para que las agencias de ayuda humanitaria puedan acelerar su respuesta a la mayor brevedad”, exhortó.

 

El funcionario nombró a dos expertos en situaciones de crisis; Marcoluigi Corsi, quien como coordinador de asuntos humanitarios para Mozambique y Sebastian Rhodes Stampa, en condición de adjunto.

 

Destacó que Mozambique, Zimbabwe y Malawi necesitan un apoyo firme y duradero. “Que esa solidaridad comience con una respuesta generosa a los llamamientos urgentes” de las necesidades de ayuda humanitaria.

 

Por su parte, la Organización Mundial de la Salud advirtió este martes desde Ginebra del riesgo “extremadamente alto” de que se produzcan enfermedades diarreicas como el cólera.

 

La doctora Djamila Cabral, representante de la Organización en Mozambique, precisó que, en la ciudad portuaria de Beira, en Mozambique, más de cien mil personas han perdido sus hogares y todas sus posesiones.

 

“Las familias, las mujeres embarazadas y los bebés viven en campamentos temporales en condiciones horribles, sin un suministro seguro de alimentos, ni agua potable y saneamiento, refirió Cabral.

 

Para prevenir un brote de la enfermedad, la OMS tiene previsto enviar un cargamento con 900 mil dosis de vacunas orales, que debería llegar a finales de esta semana.

 

Además, el Programa Mundial de Alimentos entrega ayuda alimentaria a 1,7 millones de personas en Mozambique, 732 mil en Malawi y 270 mil en Zimbabwe.

 

MGL