Rabat.- El Papa Francisco llamó a crear una sociedad abierta, plural y solidaria a través de la cultura del diálogo, como la única forma de contrarrestar el fanatismo y el fundamentalismo, en su primer discurso en Marruecos, donde realiza una visita de dos días.
El desafío es construir “una sociedad abierta, plural y solidaria”, para seguir la cultura del diálogo, “la colaboración como conducta; y el conocimiento mutuo como método y criterio”, dijo el pontífice ante el rey de Marruecos, Mohammed VI, diplomáticos y ciudadanos, en la explanda de plaza Torre Hassán.
Subrayó que “en esta tierra, un puente natural entre África y Europa, me gustaría reiterar la necesidad de combinar nuestros esfuerzos para dar un nuevo impulso a la construcción de un mundo más solidario, más comprometido con el esfuerzo honesto, valiente e indispensable de un diálogo”, reportó la agencia informativa Vatican News.
El Papa hizo referencia a los “puentes” para enfrentar los desafíos de construir una nueva sociedad, invitando a no subestimar el factor religioso, pero respetando la diferencia y reconociendo la dignidad de todo ser humano, ya que “Dios creó a los seres humanos iguales en derechos, deberes y dignidad y los llamó a vivir como hermanos y difundir los valores del bien, la caridad y la paz”.
Puntualizó que “la libertad de conciencia y la libertad religiosa -que no se limita a la sola libertad de culto, sino que debe permitir a todos vivir según sus convicciones religiosas-, están inseparablemente ligadas a la dignidad humana”.
Francisco también expresó su preocupación ante la grave crisis migratoria que, dijo, “es un llamado urgente para que todos busquen medios concretos para erradicar las causas que obligan a muchas personas a abandonar su país, su familia y, a menudo, se encuentran marginados y rechazados”.
Recordó que la Conferencia Intergubernamental sobre el Pacto Mundial para la Migración Segura, realizada en diciembre pasado en Marruecos, pidió “un cambio en la disposición hacia los migrantes, que los afirma como personas, no como números, que los reconoce en los hechos, en las decisiones políticas, en los derechos y la dignidad”.
“Espero que Marruecos, que acogió con beneplácito esa Conferencia con gran disponibilidad y exquisita hospitalidad, siga siendo un ejemplo de humanidad para los migrantes y refugiados en la comunidad internacional”, señaló.
“La gratitud se convierte en una importante oportunidad para promover el diálogo interreligioso y el conocimiento mutuo entre los fieles de nuestras dos religiones”, 800 años después del histórico encuentro entre San Francisco y el sultán al-Malik al-Kamil, indicó.
En discurso, el rey Mohammed VI evocó la visita del entonces Papa Juan Pablo II a Marruecos y subrayó la importancia del diálogo interreligioso, pues “saber quién es diferente, elimina el radicalismo, (ya que) para combatir la ignorancia es necesario invertir en educación. La religión no debería dividirse , sino unirse porque es luz, conocimiento y sabiduría”, enfatizó.
El Papa llegó este sábado a Marruecos en medio de la lluvia, fue recibido por el rey Mohammed VI, en el inicio de su visita en este país que denominó como el viaje de un “Siervo de la esperanza”.
Francisco comenzó su gira mundial número 28, con el saludo del monarca y del arzobispo de Rabat, Cristóbal López Romero.
Al descender del avión el pontífice se encontró con el saludo de decenas de niños, vestidos con trajes tradicionales, que fueron a su encuentro ofreciéndole flores.
Luego, acompañado por el heredero de la dinastía Alaoui, Francisco llegó al Salón Real para hacer una breve parada y partir en el papamóvil, en paralelo con la procesión del soberano, hacia la Torre Hasán, en la explanada de la mezquita que lleva el mismo nombre donde se llevó a cabo la ceremonia de bienvenida al Papa.
Por la tarde, el pontífice visitará el Mausoleo Mohammed V, luego se reunirá al palacio real para la presentación de la familia del rey en una visita de cortesía, para después reunirse con los migrantes en la sede de la organización Caritas de Rabat, donde el Papa ofrecerá un discurso.
fahl