La Unión Europea (UE) acelerará su labor diplomática en favor de una solución a la crisis política en Venezuela, preparando el camino para la celebración de elecciones libres, pero sin descartar nuevas sanciones, informó hoy la jefa de la diplomacia europea, Federica Mogherini.
“Vamos a intensificar el trabajo a través del Grupo de Contacto Internacional para preparar el terreno para que se celebren elecciones de forma libre y transparente lo antes posible”, dijo Mogherini en conferencia de prensa al término de la reunión de ministros de Exteriores de los países miembros del bloque europeo en Luxemburgo.
La Alta Representante de Política Exterior y Seguridad Común de la UE, sin embargo, reconoció que el objetivo de unas elecciones presidenciales adelantadas “todavía está lejano”, dada la resistencia del presidente Nicolás Maduro.
En este sentido, recordó que la UE está liderando el trabajo para preparar “una hoja de ruta” con los pasos que serían necesarios de cara a permitir la transición pacífica y democrática en Venezuela.
Respecto al acceso “vital” de ayuda humanitaria al país sudamericano, otro de los puntos en los que trabaja el grupo de contacto, Mogherini consideró “positivo” que agencias de las Naciones Unidas y la Cruz Roja estén operando sobre el terreno.
Sobre si la UE contempla extender el mandato del Grupo de Contacto Internacional, al cual se le dio un plazo de 90 días para lograr resultados tangibles desde su constitución el pasado 7 de febrero, Mogherini declaró que el grupo “no tiene fecha de caducidad” y que a mediados de mayo decidirá un camino a seguir.
“Decidiremos la vía que seguiremos, pero no es una experiencia limitada en el tiempo y tampoco es una cuenta atrás”, comentó.
En el Grupo de Contacto Internacional participan España, Francia, Alemania, Italia, Portugal, Suecia, Holanda y Reino Unido, por la parte europea, así como Ecuador, Costa Rica, Uruguay y Bolivia por la parte latinoamericana.
Asimismo, Mogherini aseguró que la UE mantiene sobre la mesa la opción de adoptar nuevas sanciones contra dirigentes del régimen de Maduro, responsables de la represión contra la población y obstrucción de las instituciones democráticas legítimas.
“Desde luego, los Estados miembro procederán con la adopción de medidas restrictivas dirigidas (en este caso), pero no hablamos de sanciones económicas en términos generales contra el país”, subrayó, insistiendo en que el principal objetivo del bloque es no perjudicar a la población civil venezolana.
“Posiblemente trabajaremos en medidas restrictivas individuales contra algunos elementos del régimen. Esto no se excluye, pero no está decidido hoy”, enfatizó.
Venezuela se encuentra sumida en una profunda crisis política, económica y humanitaria que se agravó el pasado 23 de enero, cuando el jefe de la Asamblea Nacional (Parlamento unicameral de mayoría opositora), Juan Guaidó, se autoproclamó “presidente encargado” de la nación.
Maduro, quien apenas había asumido su segundo mandato el 10 de enero tras unas elecciones que la oposición boicoteó, calificó la declaración de Guaidó de intento de golpe de Estado y responsabilizó a Estados Unidos de haberlo orquestado.
Aerolínea iraní discute vuelos a Venezuela
Una delegación de Irán llegó ayer a Venezuela en un avión comercial de Mahan Air, una aerolínea acusada de transportar equipo militar a zonas de guerra, para discutir la posibilidad de abrir una ruta aérea entre Caracas y Teherán.
Reza Jafarzadeh, portavoz de la Organización de Aviación Civil de Irán, explicó que la aeronave llevaba a funcionarios del Ministerio de Relaciones Exteriores para hablar sobre el tema.
La nave, que tardó 16 horas para cubrir la ruta, pudo ser vista cerca del mediodía de ayer en el aeropuerto Maiquetía, de Caracas.
El gobierno de Estados Unidos dijo que el establecimiento de una ruta Teherán-Caracas sería puramente un gesto político.
“Desde nuestro punto de vista, no hay razones comerciales para el establecimiento de este vuelo”, dijo un funcionario de la Casa Blanca.
DAMG/LEG