El peluquero romántico es un largometraje que te hace sentir «tan cómodo como en casa de tu abuelita», así lo afirma su director, Iván Ávila Dueñas, quien platicó con 24 HORAS acerca de su cinta que se estrena hoy en la Cineteca Nacional.
«La película busca retratar la esencia cotidiana de la Ciudad de México, que muchas veces en el cine mexicano ya se ha perdido, pero sobre todo, es una película del pasado, elementos como la música (mayormente boleros), el amor a la madre, el fútbol malo y los amigos son parte fundamental del peluquero romántico», afirmó Ávila.
Acerca de la distribución y la realización, el director mencionó que «el guión lo vengo escribiendo desde 2007 más o menos, pero de lleno lo hice hasta 2009 porque hubo otros proyectos. La película es de 2016, sin embargo la distribución no es nada fácil, somos independientes y hay problemas presupuestales, pero también tuvimos unos problemas con los derechos de una canción, así que regresamos a la parte de postproducción la cual duró cerca de 8 meses».
Al cuestionarlo sobre cuál ha sido la recepción de la película por parte de la crítica, Iván contó que «la película fue estrenada en el Festival de Cine de Guadalajara y en el de Morelia, en el cual fue muy bien recibida, gente como Luis Felipe Tovar, el cual es una persona que admiro mucho, exclamó mi trabajo y en general los comentarios críticos han sido muy buenos, ahora solo queda esperar los comentarios del público».
La película es clasificación B, sin embargo en palabras de su creador, no va dirigida para todo público, pues «no sé cómo vaya a ser tomada por un chavo de 18-20 años, quizá le aburra porque no entienda cómo es posible, desde el hecho en que alguien no use celular y todos los símbolos y la nostalgia de algo que no vivió, pero sí creo que una generación de 30 años para arriba la entenderá perfectamente y le agradará».
El papel protagónico de la cinta lo tiene el bailarín, coreógrafo y actor mexicano, Antonio Salinas, quien comparte créditos con Sara Juárez, Carlos Valencia, Larissa Wanke, Germán Betancourt, Abraham Jurado y Mayra Rivera.
LEG