Tras las declaraciones del titular del Ejecutivo; Andrés Manuel López Obrador con respecto a ofrecer un trato privilegiado a niñas, niños y adolescentes migrantes; #REDIM, Red por los Derechos de la Infancia en México, hace hincapié en que ninguna persona migrante es ilegal, especialmente niñas, niños y adolescentes quienes tienen protección internacional reforzada por su condición de edad; en consecuencia no pueden ser separados de sus familias, ni deportados a sus países de origen, como ya lo establecieron varios amparos federales que obligan a su protección integral.

 

El Estado Mexicano está obligado a cumplir con el Artículo 4o Constitucional, que determina el principio y derecho del Interés Superior de la Niñez en todas las actuaciones de sus funcionarios y en sus negociaciones con los Estados Unidos. Es lamentable que este Día Internacional de las Personas Refugiadas tenga como escenario la actitud de docilidad del Gobierno Federal ante los chantajes económicos del presidente de los Estados Unidos, con ello, el Estado mexicano renuncia a la tradición histórica de ser un país hospitalario, y contradice las obligaciones legales de no permitir injerencias externas en su política interna.

 

REDIM y diversas organizaciones de derechos humanos hemos advertido que las estrategias de seguridad militarizada, a través de la Guardia Nacional, para perseguir a las personas migrantes afectará de forma directa a niñas, niños y adolescentes que representan más del 30% de los integrantes del éxodo centroamericano. Obligando a sus familias a buscar rutas más peligrosas bajo control del crimen organizado.

 

Actualmente son graves las omisiones del Estado mexicano para brindar la protección integral que requieren las niñas, niños y adolescentes víctimas de esta emergencia humanitaria; aún cuando se anunció el pasado 30 de abril una “ruta de atención para niñez migrante”, ésta sigue siendo desconocida para las y los funcionarios federales y estatales que interactúan con niñas, niños y adolescentes migrantes, quiénes más allá de sus esfuerzos personales sólo pueden brindar asistencia desarticulada y aislada. No se está difundiendo masivamente el derecho al refugio como medida de protección prioritaria para la niñez migrante que viene huyendo de la violencia armada de Centroamérica.

 

REDIM llama al Estado Mexicano a crear un Mecanismo Transnacional de Protección Integral para la Niñez Migrante y Refugiada, en contexto de movilidad humana entre las autoridades de México, Guatemala, Honduras y El Salvador. Este Mecanismo tendrá que articular a los Sistemas Nacionales de Protección Infantil de cada país para que trabajen de manera coordinada en la prevención y atención de la migración de niñas, niños y adolescentes en la región. Y para aquellos que soliciten la protección internacional en México.

 

En REDIM reprobamos cualquier detención o deportación, llamando a recordar el terreno ganado con la suspensión definitiva que el juez Jonathan Bass Herrera emitió para que no puedan ser deportados ninguna niña, niño o adolescente y sus familiares, integrantes de las caravanas migrantes, mientras se estudiaba y resolvía el amparo presentado por la Clínica Jurídica para Personas Refugiadas Alaide Foppa y la Oficina de Defensoría de los Derechos de la Infancia A.C. Lo anterior por las omisiones del Estado mexicano, y particularmente de la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (COMAR), ante la figura de reconocimiento prima facie contemplada en la legislación mexicana. El reconocimiento prima facie significa que, ante una afluencia masiva de solicitantes de asilo se hace evidente una situación que merece una protección de carácter colectivo, sin esperar al análisis individual de cada caso. Esta obligación además es consistente con las obligaciones que tiene el Estado para brindar protección especial a niños, niñas y adolescentes.

 

Es importante notar que esto no significa que los niños, niñas y adolescentes están obligados a solicitar refugio en México. El refugio prima facie se encuentra sujeto a la voluntad de cada persona y al hecho de que cada una de ellas considera que encuentra o no seguridad en el territorio mexicano. Es de gran importancia recordar que el peligro del que muchos jóvenes centroamericanos huyen, transciende nuestra frontera sur y extiende su influencia dentro del territorio mexicano.

 

PAL