Estados Unidos está buscando con Honduras y El Salvador acuerdos migratorios similares al que firmó recientemente con Guatemala, dijo el jueves el secretario interino de Seguridad Nacional, Kevin McAleenan, lo que ampliaría la zona intermedia para los migrantes cuya meta es territorio estadounidense.
El funcionario hizo el anuncio en la capital de Guatemala, luego de que esa nación centroamericana aceptó la semana pasada convertirse en tercer país seguro para migrantes que solicitan asilo.
“No es algo que Estados Unidos está tratando de hacer sólo con Guatemala. Lo vemos como una responsabilidad regional”, afirmó McAleenan, refiriéndose al acuerdo de tercer país seguro.
México se ha negado a convertirse en tercer país seguro, pero bajo la presión del presidente Donald Trump ha aceptado acoger a migrantes centroamericanos mientras sus solicitudes de asilo son procesadas por los tribunales estadounidenses.
Como parte del acuerdo, trabajadores guatemaltecos podrán solicitar visas temporales para trabajar en el sector agrícola estadounidense. A mediano o largo plazo, las visas se ampliarán a los sectores de construcción y servicios.
McAleenan arribó esta semana a Guatemala para discutir con diplomáticos y funcionarios locales la implementación de una serie de medidas para ayudar a detener el flujo de migrantes ilegales a Estados Unidos.
En un evento simultáneo desde Palacio de Gobierno, el ministro de Gobernación de Guatemala, Enrique Degenhart, dijo que su país sólo aceptaría a migrantes de Honduras y El Salvador, como parte del acuerdo con Estados Unidos.
“Aquí no van a venir personas extranjeras de otra nacionalidad que no sean esas dos. La viabilidad de este acuerdo bilateral de cooperación (con Estados Unidos) está dirigido a estas dos nacionalidades, aseguró.
El acuerdo elevaría potencialmente las solicitudes de asilo en Guatemala de unos cientos a decenas de miles al año y la nación centroamericana no está preparada para ello.
Solicitantes de asilo, expertos en migración y críticos del acuerdo coinciden en que Guatemala tiene poca capacidad para atender a los migrantes pero, sobre todo, no cuenta con condiciones para mantenerlos a salvo.
jhs