La suspensión otorgada por el juez quinto de Distrito en Materia Administrativa de la CDMX, Juan Carlos Guzmán, para continuar con la construcción del Aeropuerto de Santa Lucía, podría representar un prematuro tiro de gracia para uno de los proyectos estratégicos de la 4T; esto porque los especialistas en el sector aeronáutico ven muy cuesta arriba que se cumpla con la eficiencia en el gasto que solicita el artículo 134 constitucional, sobre todo cuando en los simples cálculos numéricos la terminal propuesta por el presidente Andrés Manuel López Obrador resulta la más cara del mundo.
La Carta Magna establece que los recursos de que disponga la Federación se administrarán con eficiencia, eficacia, economía, transparencia y honradez para satisfacer los objetivos a los que estén destinados. Además, los resultados del ejercicio de dichos recursos se evaluarán por las instancias técnicas correspondientes, con el objeto de propiciar que los presupuestos asignados para los distintos proyectos se ejerzan en los términos anteriormente señalados.
En este sentido, la construcción de un aeropuerto en Santa Lucía, cuyo costo final de transporte aéreo por pasajero sería de 4 mil pesos, no cumple con lo dispuesto en la Constitución; pues dicho monto resulta más caro que el de terminales más tecnológicas y lujosas en el mundo. Por ejemplo, el costo de transporte aéreo por cada pasajero en Estambul, Turquía, es de 3 mil 600 pesos; en la terminal de Varsovia, Polonia, de mil 920; en Islamabad, Pakistán, de mil 340, y en Navy Mumbay, India, de 480.
En el comparativo del costo por persona con el Nuevo Aeropuerto de Texcoco, la terminal propuesta por la 4T sería más cara en mil 720 pesos; toda vez que el modesto aeropuerto de AMLO tendría capacidad para transportar únicamente a 50 millones de personas al año, cuando el ambicioso proyecto del peñismo contemplaba movilizar a 125 millones.
Habrá que recordar que en estos cálculos, además de los 70 mil millones de pesos de construcción considerados en Santa Lucía, se deben sumar los alrededor de 270 mil millones de pesos que representó para los bolsillos de los mexicanos la suspensión de los trabajos en el NAICM.
Turkish Airlines México
Continuando con los temas aeroportuarios, ya le platicaba de la llegada de Emirates Airline a México con su vuelo Ciudad de México-Barcelona a partir del 9 de diciembre, y la intimidación que ha provocado en una aerolínea “estadounidense”. Pues bien, resulta que este jueves aterrizó por primera ocasión un vuelo comercial de la aerolínea bandera de Turquía, Turkish Airlines, procedente del Aeropuerto Internacional de Estambul, operado por un equipo Boeing 777-3000ER. Será operado miércoles, viernes y domingo de cada semana. Su llegada confirma dicen, el arribo de derrama económica, y demuestra confianza en el país. La realidad dice que el gasto generado por turistas turcos en México fue de 11.6 millones de dólares en 2018, un aumento de 17.4 por ciento respecto el año anterior.
Voz en Off
Incluir obras de arte en los residenciales de lujo es la nueva tendencia de los desarrolladores inmobiliarios a nivel internacional, lo que no sólo impulsa la plusvalía que busca cualquier persona, sino el fomento a la cultura. En México, Grupo BosqueReal, a cargo de Marcos Salame, siguió este concepto que se ha visto en condominios de Miami y Buenos Aires. Las obras de artistas mexicanos en los espacios públicos han cautivado a propios y extraños y uno que ha llamado la atención es el escultor Rivelino, cuyo trabajo cobró relevancia con “Nuestros Silencios”, la instalación monumental presentada en nueve ciudades de Europa.
BosqueReal incorporó en su nuevo residencial la escultura de gran formato “Aquí”, del maestro jalisciense, con lo que se convirtió en el primer grupo empresarial en colocar una pieza de arte monumental y de gran calado en espacios comunes de los condominios. De acuerdo con el escultor, las personas que están rodeadas de naturaleza y de arte siempre tienen una mejor calidad de vida, con lo que coincide Salame, así que en BosqueReal no sólo hay más áreas verdes que en el Central Park, sino que ahora incorporan el arte.
Los habitantes de los condominios Residence admiran los famosos dedos monumentales esculpidos por Rivelino, además de las obras del artista plástico mexicano Yuri Zatarain, quien ha participado en más de 250 exposiciones en ciudades como París, Nueva York, Milán, Londres, Dubai y la Ciudad de México. El grupo empresarial invirtió 100 millones de dólares en Residence. Contrató a 15 despachos especialistas, nacionales e internacionales, para materializar el proyecto que obtuvo el premio Best Residential High Rise Architecture que otorga Central & South America Property Awards y Salame está dispuesto a seguir con las sorpresas en materia inmobiliaria.
LEG