BUENOS AIRES. El Senado de Argentina aprobó hoy por unanimidad prorrogar hasta 2022 la emergencia alimentaria en el país y convertirla en ley, con lo que se incrementarán en 50 por ciento los fondos que el gobierno destina a los comedores populares.
La iniciativa fue aprobada con 61 votos del oficialismo y la oposición, luego de tres horas de debates, que se desarrollaron en medio de una fuerte movilización de piqueteros o desempleados frente al Congreso, de acuerdo con el diario local Clarín.
La nueva ley establece que a partir del próximo año y hasta que la emergencia esté vigente, el jefe de Gabinete podrá actualizar trimestralmente el presupuesto para políticas públicas nacionales de alimentación y nutrición, tomando como referencia el aumento de la inflación y la variación de los productos de la canasta básica.
Además de incrementar en 50 por ciento el presupuesto para las políticas de alimentación y nutrición, la “emergencia alimentaria”, vigente desde 2002, buscará “cubrir los requisitos nutricionales de niños hasta los 14 años, embarazadas, discapacitados y ancianos desde los 70 años, en situación de pobreza”.
La semana pasada, la emergencia alimentaria fue aprobada por los diputados con 222 votos a favor, ninguno en contra y una abstención, tras lo cual, el oficialismo convocó al Senado para darle el aval final a la ley.
Mientras el debate se desarrollaba este miércoles en la cámara alta, frente al Congreso se concentraron miembros de organizaciones sociales como la Confederación de Trabajadores de la Economía Popular (CTEP), Barrios de Pie, la Corriente Clasista Combativa y el Frente Darío Santillán.
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