El primer lote de dos millones de dosis de la vacuna hecha en México para prevenir la influenza aviar saldrá, tentativamente, a fines de este mes de julio, afirmó el director de Salud Animal del Senasica, Hugo Fragoso Sánchez.
En rueda de prensa, explicó que México producirá, con el apoyo de laboratorios particulares, toda la vacuna contra el virus de la influenza aviar que se requiera para agosto, cuando se prevé la producción de al menos 80 millones de dosis.
Afirmó que la vacuna que se produce cumplirá con todos los estándares de seguridad que recomienda la Organización Mundial de Sanidad Animal, será probada su eficacia y capacidad protectiva y su no daño a las aves, ya que será aplicada en regiones cercanas a la zona afectada para evitar que el virus salga de ahí.
El directivo del Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica), indicó que la producción de vacuna mexicana es una de las tres opciones que se tienen para el combate a este reto sanitario que enfrenta el país.
Añadió que se cuenta con un laboratorio nacional que tiene la capacidad para producir la vacuna, pero eso lleva su tiempo porque primero se detecta la epidemia y se empieza a trabajar en el biológico para combatirla.
Comentó que otra posibilidad considerada es traer una vacuna elaborada y lista para aplicarse, “pero no hay disponible a cualquier hora y cualquier lugar y cuando uno la necesita”, debido a que se trata de enfermedad exótica que sólo se ha presentado en algunos países del mundo.
Refirió que hay brotes activos de fiebre aviar en Pakistán e Italia, pero no se puede traer la vacuna porque su producción está comprometida.
Dijo que la que había disponible en algunos países se está localizando con permisos de importación para traerla a México, pero se tienen que elaborar una serie de pruebas para determinar si es segura y si realmente protege, además de que cuando mucho hay disponible tres millones de dosis.
Agregó que la tercera opción en la que se trabaja es la investigación coordinada con científicos del Departamento de Agricultura de Estados Unidos, país que cuenta con un laboratorio mundial de referencia de influenza aviar.