La figura de la revocación de mandato con un gobierno centralista, autoritario y conformando amplias clientelas electorales, parece más una estrategia de Morena para que, a través de una ley secundaria, impulsar la reelección o ampliación de mandato del Presidente de la República en 2024, aseguró el dirigente nacional del PAN, Marko Cortés.
Señaló que “la prueba indiscutible de esa burda maniobra” es que la mayoría morenista no acepta que se empiece a utilizar la revocación hasta el próximo sexenio, sino busca que sea durante el actual gobierno de López Obrador.
Dijo que el hecho de contar con mayoría parlamentaria, le permite a Morena abusar y modificar en cualquier momento la legislación secundaria a su antojo.
“Ocurrió con la Guardia Nacional, que fue fraude a la ley porque todas las fuerzas políticas apoyaron pero con la condición de ser dirigida por un civil y no por un militar en activo; o en la reforma educativa, que sin ningún recato regresó el poder a los sindicatos durante la aprobación de las leyes secundarias.
“La revocación del mandato mal utilizada podría traer gobiernos menos eficientes y más irresponsables, que solo apuesten por construir clientelas electorales, es un traje a la medida que Morena quiere hacerle al Presidente, un instrumento político electorero para beneficiarse como partido y perpetuar al Presidente en el poder”, aseguró el panista.
Consideró que es un despropósito para intentar manipular la voluntad de los ciudadanos, cuando ocho de 10 mexicanos rechaza cualquier tipo de reelección presidencial en México.
El Presidente de Acción Nacional advirtió que la revocación de mandato puede convertirse en la peor herramienta de manipulación ciudadana y de abuso de poder, “no podemos darle una herramienta supuestamente democrática a un gobierno centralista, populista y antidemocrático, para que sea mal empleado”.
Recordó que de los 70 países con sistema presidencial como el de México solo tres contemplan la figura de revocación de mandato, Bolivia, Ecuador y Venezuela y dos de ellos, Venezuela y Bolivia, la han usado para justificar la reelección de sus mandatarios.
JMSJ