LONDRES.- El primer ministro británico, Boris Johnson, presentó este martes una nueva propuesta para celebrar elecciones y romper el estancamiento sobre el Brexit, tras cerca de tres años y medio de pulso parlamentario que ha sumido en el caos la salida de Reino Unido de la Unión Europea.
Mientras la UE acepta una tercera prórroga a un divorcio que debía haberse completado originalmente el 29 de marzo, Reino Unido, su Parlamento y sus votantes siguen divididos sobre cómo -o, de hecho, si- seguir adelante con el proceso.
Johnson, que había prometido culminar el Brexit el 31 de octubre, ha pedido de forma reiterada un adelanto electoral para poner fin a lo que califica como una parálisis de pesadilla que está afectando a la confianza pública al impedir la culminación del proceso de ninguna de las maneras posibles.
Después de que el Parlamento rechazó el lunes la tercera solicitud de elecciones hecha por Johnson, este martes intentará forzar un proyecto de ley para convocar unos nuevos comicios el 12 de diciembre. Necesita una mayoría simple para que los legisladores den luz verde a sus planes.
Las primeras elecciones que celebra Reino Unido en fechas navideñas desde 1923 serían altamente impredecibles: el Brexit ha hartado e irritado a muchos votantes, al tiempo que ha erosionado las lealtades tradicionales de los dos partidos principales, el Conservador y el Laborista.
Al final, los votantes deberán elegir entre un envalentonado Johnson presionando por su acuerdo de Brexit o por un gobierno socialista con Jeremy Corbyn renegociando el pacto antes de un referendo. Si ninguno de los partidos logra un triunfo contundente, el estancamiento por el Brexit continuaría.
Aunque casi todos los políticos británicos están de acuerdo en que es necesario volver a las urnas, los rivales de Johnson quieren infligirle el mayor daño político posible al impedir que su acuerdo de último minuto con Bruselas sea ratificado antes de unos comicios.
Johnson, por su parte, está intentando que sea el Parlamento el que cargue con la culpa por ser incapaz de culminar el Brexit para la fecha prevista del 31 de octubre.
Tal es la falta de confianza en el Parlamento que los legisladores están peleando por casi todo, desde la secuencia del Brexit a la fecha de las elecciones. Pese a todo, Johnson está más cerca de unos comicios que nunca antes en los agitados tres meses que lleva en el cargo.
Dos partidos opositores, los Liberales Demócratas y el Partido Nacional Escocés, quieren las urnas para el 9 de diciembre. La BBC citó fuentes no identificadas de la oficina de Johnson que aseguraron que el gobierno aceptará una enmienda presentada por partidos opositores para celebrar las elecciones el 11 de diciembre.
gac