Luego de la relatoría de hechos que presentó la Secretaría de la Defensa Nacional del fallido operativo contra Ovidio Guzmán, presunto narcotraficante, el factor inexplicable es el porqué no hubo respuesta del Poder Judicial, destacó Javier Oliva, especialista en seguridad de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), en entrevista con 24 HORAS.
“Las cuatro horas que estuvo el personal militar en la casa del presunto delincuente porque no tenía la orden nunca llegó, y fue el tiempo que aprovecharon los delincuentes para cometer la serie de actos criminales.
“Habría que preguntarle por qué no se dio la orden de aprehensión, en esa omisión o falta es donde comienza o precipita que los elementos de la Guardia Nacional y el Ejército se apresuraran, con la adrenalina es explicable”.
Consideró oportuno que se haya solicitado la orden de cateo ante la Fiscalía General de la República justo cuando ya estaban los militares listos para el operativo, pues de haberse hecho antes, y ante la “porosidad” del Poder Judicial, existía el riesgo de filtración.
Ante la relevancia del presunto delincuente –dijo– se tenía que actuar con apegado al Estado de Derecho.
Consideró acertada la decisión del presidente Andrés Manuel López Obrador, pues reflejó que contó con información fidedigna.
“No hubo ninguna detención arbitraria ni presentación ante la autoridad, ni destrozos; en cambio, los delincuentes si allanaron cuatro departamentos (de la unidad habitacional Militar)… Ellos iban a llevarse gente para intercambiarla por el delincuente, veamos como sociedad ante qué monstruo estamos”.
El entrevistado apuntó que debe haber una reorientación de los operativos sobre todo en zonas urbanas, por el riesgo de que se repita la estrategia por parte de los delincuentes.
LEG