Mexicali, Baja California.- Minutos después de rendir protesta como gobernador constitucional de Baja California, Jaime Bonilla aseguró que no llegó al poder para perpetuarse en él.
“Si cumplimos cinco años, yo me voy a someter a la revocación de mandato. El pueblo pone, y el pueblo quita.
“Que no se asusten los contrincantes de que queremos perpetuarnos en el poder, no estamos por eso, estamos para dar resultados”, expresó el mandatario en un breve mensaje que dirigió en la entrada de a sede del Poder Ejecutivo en esta localidad.
Bonilla asumió la gubernatura en medio de una crisis política en el estado ocasionada por la aprobación de una modificación a la legislatura local que amplió su mandato de dos a cinco años.
Este cambio fue motivo de que el PAN, PRI, PRD y Movimiento Ciudadano presentaran acciones de inconstitucionalidad en la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) en contra de la decisión del congreso bajacaliforniano.
En su discurso de esta madrugada, Bonilla reiteró que la decisión que tome el máximo tribuna de la Nación la acatará.
Ya sin la presencia de la Secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, por quien preguntó al momento de tomar el micrófono, el morenista anunció que dará una conferencia de prensa semanal para informar de las acciones que emprenderá al frente de la administración.
“Todos los días, no importa cuántos días tengamos para gobernar, todos los días se va a trabajar, yo soy un hombre de trabajo y vamos a demostrar que sí se pueden hacer las cosas con pocos recursos.
“Se les va a pagar a los maestros, y se les va a pagar a tiempo; se van a cubrir las jubilaciones y las pensiones, y a partir del 4 de noviembre empiezan los desayunos gratuitos”, aseveró.
Afirmó que a la Universidad Autónoma de Baja California se le darán mil 200 millones de pesos para cubrir sus necesidades.
Además, dijo que se renovará todo el sistema de riego de Mexicali, se sanearan las pensiones y se creará una policía de proximidad que trabajará en coordinación con la Guardia Nacional.
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