El barco Alan Kurdi, con 88 migrantes a bordo, entró este viernes en aguas territoriales italianas, luego de permanecer varado en el Mediterráneo por siete días en espera de que le asignen un puerto seguro para desembarcar.
“En este momento hemos entrado en aguas territoriales italianas para buscar refugio del viento y las olas”, informó la organización no gubernamental (ONG) Sea Eye, que opera el barco, reportó la agencia italiana de noticias Ansa.
La ONG alemana a través de su cuenta Twitter lamentó que a pesar del acuerdo entre Alemania, Italia y Francia para distribuir a los migrantes, aún no se les ha asignado un refugio seguro.
El barco Alan Kurdi se ubicaba a pocos kilómetros de las costas del este de la isla italiana de Sicilia.
Unas horas antes de ingresar a las aguas territoriales italianas, la Guardia Costera permitió el desembarco de una embarazada, que ya no podía permanecer en el barco por motivos de salud.
Mientras que Alan Kurdi espera la autorización para atracar en un puerto seguro, este viernes los 15 migrantes que el martes rescató Open Arms, una organización española, a 45 millas de la costa libia, fueron transferidas a un barco de la Guardia Costera de Malta.
Además, en otra llamada de emergencia, Alarm Phone alertó este viernes sobre una barca en peligro en aguas de Malta, en donde habría al menos unas 40 personas, entre ellas siete mujeres, que partieron de costas libias.
Italia reportó en los últimos dos meses un aumento de arribos de inmigrantes, en septiembre pasado registró dos mil 498 frente a los 947 de mismo mes de 2018; mientras que en octubre reportó dos mil 15 frente a los mil de mismo periodo de hace un año.
RYHP