Sobrepasar la ingesta diaria de sodio es factor de riesgo para desarrollar hipertensión, problemas en el corazón, como insuficiencia cardíaca e infartos, accidente cardiovascular (hemorragia) y daño en riñones, que lleva a insuficiencia renal e incluso la posibilidad de presentar cáncer gástrico o colorectal, alertó el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
A nivel mundial podrían evitarse casi dos y medio millones de defunciones, si el consumo de sal disminuye al nivel recomendado por la Organización Mundial de la Salud (OMS), que es de cinco gramos al día, es decir, una cucharada cafetera, informó la experta que encabeza un proyecto en Nutrición en la División de Hospitales de Segundo Nivel del IMSS, María Concepción Domínguez Correa.
En un comunicado, señaló que en la actualidad hay cuatro millones 760 mil 161 derechohabientes del IMSS diagnosticados con hipertensión arterial, sin embargo, poco menos de un millón 200 mil acuden con regularidad a recibir atención médica para el control de su padecimiento. Así, uno de cada tres mexicanos adultos tiene hipertensión arterial sistémica.
Ante el incremento de la hipertensión arterial en los mexicanos, los servicios de Nutrición y Dietética del Seguro Social se promueve el consumo de alimentos naturales y la disminución del consumo de alimentos industrializados.
Y cuando se diagnostica al paciente hipertensión arterial sistémica, éste es remitido a Nutrición y Dietética donde le elaboran un plan alimentario personalizado, puntualizó Domínguez Correa.
La especialista en nutrición del IMSS recomendó una dieta equilibrada y variada, reducida en sal, que no sobrepase la recomendación diaria, que incluya frutas, vegetales, granos integrales, lácteos bajos en grasas y carnes magras; además de la consejería de los beneficios de beber agua simple potable, tener un peso saludable y realizar actividad física, pues todo ello favorece la prevención y el control de la hipertensión arterial.
Dio a conocer que la sal es vital para el correcto funcionamiento del organismo, consumirla en las cantidades recomendadas permite una adecuada función de los músculos y del corazón; ayuda al cerebro a controlar los impulsos nerviosos; regula los fluidos extracelulares del cuerpo (las células necesitan agua para trabajar) y también mantiene el pH de la sangre en un balance entre ácido y alcalino.
Destacó que en la dieta del mexicano se han ido incorporando cada vez más alimentos industrializados y comidas rápidas, los cuales contienen altas cantidades de sal, es el caso de frituras comerciales, sopas instantáneas, pastelillos, enlatados, palomitas de maíz, carnes embutidas y ahumadas, quesos, cereales, pizzas, hamburguesas y hot dogs, entre otros.
A esto, agregó, se suma que al momento de cocinar los alimentos generalmente se utilizan sazonadores, aderezos y condimentos industrializados para dar más “sabor a la comida”, pero éstos contienen cantidades elevadas de sodio; otro factor es que al servir los alimentos, hay quienes sin probarlos les agregan sal, por lo que se recomienda retirar el salero de la mesa durante las comidas.
RYHP