Rafael Nadal es indestructible. Eso debió pensar Daniil Medvedev este miércoles en Londres. El ruso ganaba por 5-1 en el tercer set y tenía punto de partido para derrotar al número uno del mundo, pero en un abrir y cerrar de ojos el español remontó 6-7 (4), 6-3, 7-6 (4) y sumó una importante victoria para mantenerse con vida en las ATP Finals.

En la reedición de la final del pasado US Open, el español derrotó al ruso y sumó su primer triunfo en el Grupo Andre Agassi. El español, quien había caído el primer día ante Alexander Zverev en dos sets, se recompuso a tiempo para llegar al viernes con opciones de alcanzar las semifinales del torneo que reúne a los ocho mejores tenistas de la temporada en la O2 Arena.

Nadal, que dominaba por 2-0 la rivalidad ante Medvedev, salió decidido a cambiar la imagen que ofreció el primer día ante Zverev, en un partido que no afrontó bien. El campeón de 19 torneos del Grand Slam se mostró muy agresivo, decidido ir a por el encuentro, y consiguió desarbolar por momentos el tenis férreo de Medvedev, que también cayó en su primer encuentro en Londres contra Stefanos Tsitsipas.

El español, ahora con un balance de 1-1 en la fase de grupos de la competición, sumó su tercer triunfo ante el cuarto del mundo, al que se había impuesto en los dos duelos anteriores entre ambos, disputados este año en Canadá y en el US Open.

Nadal jamás ha podido levantar el título en las ATP Finals. El español llegó a la final en 2010 (perdió con Roger Federer) y 2013 (cayó ante Novak Djokovic) en el único gran torneo que se le sigue resistiendo en su histórico palmares de conquistas. Nadal, campeón este año de Roland Garros (venció a Dominic Thiem en la final) y el US Open (ganó a Medvedev), no pudo competir el curso pasado en las Finals, lesionado, y en 2017 se retiró después de disputar el primer partido ante David Goffin como consecuencia de otra lesión en su rodilla.

Nadal, sin molestias en el abdominal, la lesión que le obligó a retirarse de las semifinales del Masters de París, sacó sin problemas, como ya hiciera el lunes contra Zverev, pero además encontró su ritmo de crucero, algo que no había logrado ante el alemán. Así, desplegó por momentos su mejor versión y tiró de garra en otros para conseguir doblar la resistencia del ruso, que acarició el victoria al final del duelo.

El español se enfrentó a una bola de break en el primer set, con 3-3 en el marcador. Nadal, sin embargo, la salvó para seguir adelante en una manga muy igualada, en la que mandaron los saques sobre los restos hasta llegar a un desempate frenético que Medvedev empezó dominando (1-0) y que su contrario empató (3-3) antes de ver cómo el ruso devoraba ese desempate a golpes de un aluvión de golpes ganadores que le valieron para tomar ventaja en el encuentro haciéndose con ese primer parcial.

Nadal reaccionó como se esperaba: le rompió el saque a Medvedev en el primer juego del segundo set, primer break del partido, y lo mantuvo durante toda esa segunda manga hasta empatar el encuentro, soñando con salir victorioso en el tercer parcial, intentando aprovecharse de la inercia ganadora adquirida por el camino.

Sin embargo, Medvedev impuso su ley desde el primer momento. El ruso arrancó el set con un doble break para ponerse 4-0 en la manga decisiva, abriendo una gran distancia con su contrario. Imparable, el ruso llegó al 5-1, y tuvo punto de partido para haber ganado a Nadal. Ocurrió que el español fue capaz de conseguir un imposible: darle la vuelta al encuentro, con una remontada imposible, y llevárselo en el tie-break decisivo.

Otro semifinalista

Para asegurar su clasificación anticipada a semifinales, Stefanos Tsitsipas necesitaba ganar en sets corridos y que Rafael Nadal en la misma jornada se impusiera en tres sets. Eso fue exactamente lo que ocurrió.

LEG