Desde que empezó la propagación del coronavirus, no se ha dejado de ver fotografías con gente portando mascarillas para prevenirlo, especialmente en el lugar donde se originó, sin embargo, los expertos nos dicen la verdad sobre su uso.
Las mascarillas son de uso cotidiano para la zona oriental del mundo, ya que sufren también altos niveles de contaminación, pero los virólogos se encuentran escépticos a cerca de su uso en contra de este nueva cepa, por supuesto son efectivos al evitar las transmisiones de boca a boca.
El gran invento en cuestión de higiene fueron las mascarillas en el siglo XVIII, pero fueron de uso público cuando se dio el brote de la gripe española de 1919, a cual privó de la vida a 50 millones de personas.
“Las mascarillas quirúrgicas para el público no son una protección efectiva contra los virus o bacterias transportadas en el aire”, aseguró el médico del hospital St George’s de Londres, David Carrington.
El experto explicó que son demasiado “sueltas, sin filtros de aire y que deja los ojos expuestos”, por lo que no son tan efectivos como se cree.
Agregó que dicho objeto reduce el riesgo de quedar infectado de este virus, sin embargo, no es 100% efectivo a menos que sea contacto de boca a boca.
Hizo referencia a un estudio realizado en Nueva Gales del Sur, donde sugiere que las personas se tocaban la cara un aproximado de 23 veces por hora.
Sin embargo, el profesor de virología molecular en la Universidad de Nottingham, Jonathan Ball, aseguró que dentro de hospital con ayuda de un tratamiento bien controlado “la mascarilla puede ser tan buena para prevenir una infección como un respirador hecho a la medida”.
Los respiradores tiene un filtro de aire especializado, que esta diseñado de forma específica para proteger contra ciertas partículas potencialmente peligrosas en el aire.
El experto añadió que las mascarilla tendría mejores resultados de tener un uso de todo el día, sin embargo, es complicado acostumbrarse como público en general.
“Cuando uno ve los estudios que analizan su efectividad en la población en general, los datos son menos convincentes: es todo un desafía mantener una mascarilla durante períodos prolongados de tiempo”.
En tanto, las medidas de higiene más recomendadas según el doctor Connor Bamford, proveniente del Instituto Wellcome-Wolfson de Medicina Experimental, señaló que con medidas de higiene simples se puede lograr un mejor resultado.
“Cubrirse la boca al estornudar, lavarse las manos y no llevarse las manos a la boca antes de lavarlas podría ayudar a limitar el riesgo de no contraer cualquier virus respiratorio”.
Las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS) la mejor forma de evitar un contagio masivo con esta nueva cepa china, se debe de evitar el contacto cercano con personas que tengan una infección respiratoria.
La OMS recalcó que se deben lavar las manos de forma constante y evitar contacto sin protección con animales de granja o salvajes.
Finalmente, el jefe de infecciones emergentes de la Salud Pública de Inglaterra, Jake Dunning enfatizó que “aunque existe la percepción de que el uso de mascarillas puede ser beneficioso, hay muy poca evidencia de un beneficio generalizado de su uso fuera del entorno clínico”.
Otra recomendación de Dunning, es que las mascarillas deben de ser cambiadas con frecuencia y eliminarse de forma segura.
“La investigación también muestra que el cumplimiento de estos comportamientos recomendados se reduce con el tempo cuando se usan mascarillas por períodos prolongados”.
Con información de la BBC.
TFA