La designación de Gildo Garza como director general del Programa de Agravios a Periodistas y Defensores Civiles mereció una queja ante la Contraloría de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) y una denuncia en la Secretaría de la Función Pública (SFP) por parte de la organización no gubernamental Periodistas Desplazados México.

La ONG señaló que la designación de Garza Herrera viola el artículo 65, apartado I y IV del reglamento interno de la Comisión al no contar este con el título profesional legalmente expedido y la experiencia necesaria para las atribuciones del encargo.

Periodistas Desplazados compartió capturas de pantalla de la búsqueda de la cédula profesional de Gildo Garza, misma que no aparece en el sistema de la Secretaría de Educación Pública.

“La designación de #GildoGarzaHerrera como Director General o Visitador adjunto, viola (Art. 65 apartado I y IV) del reglamento interno de @CNDH, al no contar éste con título profesional legalmente expedido y la experiencia necesaria para las atribuciones de este encargo”, publicaron en su cuenta de Twitter el 1 de enero.

Además, en diversos medios circularon versiones sobre los antecedentes de Garza, a quien señalan de incumplir una pensión alimenticia, de recibir dinero del PRI y de haber cuestionado al presidente Andrés Manuel López Obrador sobre su estado de salud mediante solicitudes de información.

El 1 de febrero, en su cuenta de Twitter, Garza comentó que hace dos años habían creado la Asociación Mexicana de Periodistas Desplazados y Agredidos: “tuvimos un sueño después de una tragedia y la indolencia del gobierno de mis hermanos @RencorMiMo, @bellopinedaoma1, @CynthiaYarel y otros más (…) hoy por motivos institucionales dejo la encomienda de representarlos ante la AMPDA”.

Y adelantó que pronto estaría en “un lugar donde se podrá ayudar sin distingo, sin olvido, sin revictimización y sin simulación ni lucro”.

LEG