Distinguir a Polanski es escupir en la cara de todas las víctimas. Significa que violar mujeres no es tan malo”, declaró la actriz Adèle Haenel, protagonista de “Retrato de una mujer en llamas”, luego de abandonar el teatro donde se realizaba la entrega de los Premios César en Francia donde Roman Polanski fue reconocido como Mejor Director.

 

El galardón fue otorgado a Polanski a pesar de las acusaciones de pedofilia en su contra, por lo que al recibir el Premio César como Mejor Director por su cinta “el Oficial y el Espía” causó indignación de varias actrices, quienes abandonaron la ceremonia en protesta.

La primera en abandonar el teatro fue Adèle y le siguieron varias actrices.

Asociaciones feministas se levantaron en armas luego de la lluvia de nominaciones al director de “El Pianista”, por lo que decidió no asistir a la entrega de los Premios César.

 

Polanski, de 86 años, anunció el jueves que renunciaba a asistir a la ceremonia. “Lamento tomar esta decisión, la de no afrontar un tribunal de opinión autoproclamado”, dijo el director. Su decisión fue secundada por el conjunto del equipo de la película, incluido su protagonista, el actor Jean Dujardin.

 

Con información de medios

 

aarl