En estas últimas cuatro a cinco semanas, los mercados han registrado fuertes y significativos ajustes en sus diferentes segmentos como Bolsas, divisas, materias primas, ante una pandemia por el coronavirus que aún no se sabe su total alcance. Sin embargo, lo que ha ido haciendo, es “enfriar drásticamente la economía mundial”, iniciando con China donde hasta hace apenas unas dos semanas, las grandes empresas trabajan a una capacidad promedio del 85%, mientras que las Pymes están a un 60%. Frenó durante seis a ocho semanas su actividad productiva. China representa más del 30% de la aportación al crecimiento mundial y su intercambio comercial es relevante a nivel global. Este virus se propagó hacia Europa, destacando en Italia y España, que ya representan el 16 y 10% del total de contagios, frenando cualquier actividad económica.
Desde hace una semana, el coronavirus llega en mayor medida a Estados Unidos que ya representa el 12% del contagio total. Destacan ciudades como Nueva York, New Jersey, Washington y California como los estados con mayor contagio. Los datos de manufactura y servicios, así como el aumento en las solicitudes por seguro de desempleo (mañana saldrá un dato muy malo), ya demuestran el efecto negativo hacia la economía americana.
Todo esto ha generado una caída rápida de los mercados y un fortalecimiento del dólar como moneda de mayor intercambio mundial. Vinieron las acciones muy “agresivas” de inyección de liquidez por parte de la Fed y también del Gobierno de Donald Trump. Hablamos de montos “cuantiosos” que al menos representarán 12 a 13% del PIB de Estados Unidos (recursos que representan alrededor de 5 a 6 años de crecimiento económico).
Todo esto se suma a las acciones por ejemplo de Gobiernos de Europa y del Banco Central Europeo (BCE) para contener el fuerte enfriamiento y deterioro de sus economías.
Así, ante caídas que alcanzan un rango de entre 17 y 27% de las bolsas americanas en lo que va del año, depreciaciones del orden de 15 a 32% en divisas, incluyendo a la moneda mexicana que llegó a superar los $25.50 en el mercado interbancario, caídas de un 58 a 73% en el precio del petróleo, 20% de caída en la plata y solamente con cierta volatilidad, el ORO ha sido ganador en el año (9.2%).
Las tasas de interés en Estados Unidos se han aproximado a tasa cero. En plazos a tres meses, paga 0.03% anual y a 10 años por ejemplo, opera entre 0.8 y 1.0% anual.
Haciendo un análisis de los movimientos globales, consideramos que obedecen a correcciones de mercados desde 2009 a 2020, tendencia de incrementos que sobrepasó los tiempos promedio de un ciclo de alza.
Por ello, es probable que en breve, veamos rebotes técnicos temporales en todos los mercados, incluyendo a la Bolsa en México y al Tipo de Cambio, generando además, un mejor momento en la curva de tasas de interés en nuestro país. Banxico, deberá seguir tratando de ajustar la tasa de interés en la medida de lo posible. En nuestro caso, tenemos en contra la situación crítica de Pemex, cuyos papeles en dólares se han deteriorado muy fuerte y el riesgo de la calificación crediticia de Pemex y de la Nota Soberna en estos momentos se vuelve más crítica.
La calma próxima que estamos esperando en los mercados, viene por la fuerte inyección de recursos de bancos centrales y Gobiernos. Aquí Banxico ha tomado iniciativas positivas pero no suficientes y el Gobierno federal requiere anunciar medidas que realmente contengan el enfriamiento de la economía que llegará muy pronto. De no hacerlo en tiempo y forma, aumentará el riesgo de una crisis económica mayor para nuestro país, con importantes pérdidas de empleo y cierre de empresas de todos tamaños.
@1ahuerta