El mercado petrolero enfrentó su peor jornada en la historia, luego de una caída de hasta 300% en el precio de los futuros del petróleo de Estados Unidos, derivado de los bajos espacios de almacenamiento de crudo y su poca demanda a nivel global por la pandemia del Covid-19.
De esta manera, el contrato futuro del West Texas Intermediate (WTI) cayó 55.90 dólares, al venderse en -37.63 dólares por barril. Dicho desplome comenzó a pocos minutos de la apertura de la jornada, tocando un mínimo de casi -40.32 dólares por barril.
En paralelo, el Brent también mostró un descenso de apenas 7.30%, al venderse en 26.03 dólares por barril. No obstante, este comportamiento se explica porque el almacenamiento en Cushing, Oklahoma, lugar donde se entrega el WTI, está por llegar al límite de su capacidad, en donde hasta la semana pasada ocupó el 72%.
Además, la mezcla mexicana cerró en -2.37 dólares por barril, igual a un desplome de 116.51% respecto al viernes pasado cuando se cotizó en 14.35 dólares por barril. Este precio es el más bajo desde que se tiene registro, según datos de Petróleos Mexicanos y el Banco de México (Banxico).
Especialistas consultados por 24 HORAS refirieron que las medidas de confinamiento por el coronavirus, aplicadas por diversos países, provocó dicho desplome en la demanda global del crudo a inicios de marzo. De ahí que la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) pactó un acuerdo, luego de una guerra de petroprecios entre Arabia Saudita y Rusia, para reducir 9.7 millones de barriles diarios la producción petrolera a partir de mayo y contener los altos niveles de inventarios.
Ana Azuara, analista de commodities para Banco BASE, explicó que si bien la resolución de este pacto fue positiva para el mercado, los efectos del mismo comenzarán a observarse hasta que entre en vigor.
Consideró que el precio del crudo podrá seguir deprimido, aunque no a los niveles de ayer, hasta que se perciban las primeras reducciones de producción y regrese la calma en los mercados mundiales.
Añadió que la recuperación en la demanda dependerá de las medidas de prevención que tome cada país para contener el Covid-19.
Carlos Tabares, director de análisis y estrategia bursátil de Monex, señaló que uno de los escenarios de largo plazo a considerarse para México será el precio de la cotización en la mezcla mexicana, que se verá presionado por el referencial del WTI.
Dadas las condiciones petroleras actuales, añadió, se deben de analizar los niveles estimados de producción para 2020 y “a qué costo” se quieren obtener, toda vez que Pemex perdió su grado de inversión y proyectos como la refinería de Dos Bocas pueden dejar de ser atractivos para los inversionistas. Tan solo en 2019, el costo promedio de producción por barril fue de 14.52 dólares.
En tanto, José Luis de la Cruz, director del Instituto para el Desarrollo Industrial y el Crecimiento Económico (IDIC), dijo que a un menor precio de la mezcla mexicana se pueden tener caídas en los ingresos petroleros para el Gobierno federal.
De esta manera, argumentó que las finanzas públicas del país quedarían más vulnerables ante la turbulencia económica por el Covid-19, al igual que representaría un llamado urgente a que se busquen alternativas de financiamiento para sobrellevar la crisis de los próximos meses.
Los especialistas coincidieron que con el descenso en los precios internacionales del petróleo, continuará una baja en el costo de la gasolina a lo largo del país durante las próximas semanas.
LEG