La infección del nuevo coronavirus puede propagarse de humanos a gatos, así como entre gatos, lo que hace posible que los felinos domésticos se integren a la cadena de transmisión hacia los humanos, afirmó el especialista Yoshihiro Kawaoka, del Instituto de Ciencias Médicas de las Universidad de Tokio.
En la edición electrónica de la revista científica The New England Journal of Medicine, publica la investigación que se centró en la transmisión de humanos a gatos del covid-19 y del contagio entre los felinos.
Tres gatos domésticos fueron inoculados con el virus SARS-CoV-2 para realizar el experimento.
Un día después de la inoculación, un gato sin infección previa fue puesto en cohabitación con cada uno de los gatos inoculados para evaluar si la transmisión del virus por contacto directo puede ocurrir entre los gatos.
Los felinos fueron analizados con muestras de hisopos nasales y rectales, y se encontró que dos de los gatos sanos resultaron contagiados por contacto directo con sus pares inoculados.
Aunque los investigadores aceptan que ha habido informes de gatos infectados sintomáticos, ninguno de los gatos del estudio mostró síntomas.
A 24 días de la inoculación, a todos los felinos participantes del estudio les detectaron anticuerpos relacionados a la inmunidad al nuevo coronavirus.
Los investigadores reconocieron que hacen falta mayores estudios para conocer la cadena potencial de transmisión humano-gato-humano del coronavirus, entre miembros de la familia en hogares con gatos.
En 2016, un brote de influenza H7N2 en refugios para gatos de Nueva York destacó las implicaciones para la salud pública de la transmisión de gato a humano, a los trabajadores en refugios de animales.
El estudio concluyó que los gatos pueden ser un huésped intermedio silencioso del SARS-CoV-2, ya que los felinos contagiados no muestran síntomas apreciables.
Dada la necesidad de detener la pandemia del coronavirus a través de varios mecanismos, incluyendo la ruptura de las cadenas de transmisión, los investigadores japoneses exhortaron a profundizar los estudios para comprender mejor el papel que los gatos pueden desempeñar en la transmisión del coronavirus a los humanos.