Las protestas por la muerte de un hombre negro a manos de la policía durante un detención en Minneapolis se extendieron a varias ciudades de Estados Unidos el viernes por la noche, a pesar de que la fiscalía acusó de homicidio a uno de los agentes implicados.

 

Cientos de personas se reunieron en varios puntos del país, como frente a la Casa Blanca, en Washington, pero también en Nueva York, Dallas, Houston, la ciudad natal de la víctima, o Las Vegas, Des Moines, Memphis y Portland. En Atlanta, se quemaron coches de policía.

 

En la ciudad de Minnesota entró en vigor el toque de queda el viernes por la noche. La policía lanzó gases lacrimógenos contra cientos de manifestantes que desafiaron la orden.

 

La familia de George Floyd, 46 años, a la que el presidente Donald Trump informó haber llamado, saludó la detención del policía como un primer paso “en el camino a la justicia”, pero la consideró “tardía e insuficiente”.

 

“Queremos una acusación por homicidio voluntario con premeditación, y queremos ver a los otros agentes (implicados) arrestados”, afirmó la familia en un comunicado.

 

El policía que presionó con la rodilla el cuello de Floyd fue arrestado y acusado de asesinato en tercer grado, dijeron las autoridades.

 

El agente “Derek Chauvin ha sido acusado por la oficina del fiscal (…) de asesinato y homicidio involuntario”, dijo el fiscal , Mike Freeman, a periodistas.

 

Chauvin es uno de los cuatro agentes despedidos del cuerpo policial tras conocerse el video que muestra el arresto el lunes de Floyd por supuestamente tratar de pagar en una tienda con un billete de 20 dólares falso. El fallecido aparece esposado y acostado en la calle con la rodilla del Chauvin sobre su cuello por al menos cinco minutos.

 

Esas imágenes dispararon furibundas protestas en Minneapolis, donde cientos de tropas fueron desplegadas la madrugada del viernes tras la tercera noche de disturbios. La alcaldía de la ciudad impuso a en la tarde del viernes un toque de queda absoluto para evitar la repetición incidentes a partir de las 8:00 pm hasta la 6:00 am del sábado.

 

“Hemos estado chocando durante demasiado tiempo. Nos estamos muriendo, hermano, con la rodilla de alguien en el cuello cuando no hicimos nada (…). Así que eso es todo, hemos terminado. Hemos terminado. Hemos terminado. Quiero decir, ya estamos muertos, así que bien podríamos morir por la buena causa, ¿no?”, dijo a la AFP un manifestante de Minneapolis que sólo quiso ser identificado por su nombre de pila, Chicago.

 

Extendidas protestas

 

En una rueda de prensa, Trump dijo haber llamado a la familia de Floyd.

 

“Hablé con miembros de la familia, gente excelente”, dijo en la Casa Blanca. “Entiendo el dolor, entiendo el dolor. Esta gente realmente ha pasado por mucho. La familia de George tiene derecho a la justicia y la gente de Minnesota tiene derecho a vivir a salvo”, afirmó.

 

Trump fue criticado por comentarios en Twitter en los que llamaba “matones” a los manifestantes y advertía que “cuando comiencen los saqueos, comenzará el tiroteo”.

 

El expresidente Barack Obama, el primer negro en llegar a la Casa Blanca, dijo compartir la “angustia” de millones de personas por la muerte de Floyd y que el racismo “no debería ser ‘normal’ en el Estados Unidos de 2020. No puede ser ‘normal'”.

 

“La gente está enojada porque está frustrada porque este no es el primer asesinato policial que han visto en el país”, declaró en tanto Al Sharpton, un destacado activista por los derechos de los negros, a la cadena MSNBC.

 

Joe Biden, candidato demócrata a la Casa Blanca y exvicepresidente de Obama, denunció a su vez la “herida abierta” del “racismo institucional” en Estados Unidos y aludió, sin nombrarlo, Donald Trump.

 

“Ahora no es el momento de alentar la violencia”, dijo. “Necesitamos un liderazgo real, un liderazgo que conduzca al diálogo”.

 

Comisaría en llamas

 

Durante la noche del jueves al viernes, manifestantes rompieron las barreras policiales y tomaron las comisaría de Minneapolis donde trabajaban los cuatro agentes involucrados en la muerte de Floyd. Se produjo un incendio que pronto envolvió la estructura.

 

La Guardia Nacional del estado de Minnestota anunció que 500 efectivos fueron desplegados la mañana del viernes en Minneapolis y la vecina ciudad de St. Paul para restablecer el orden.

 

“Nuestras tropas están entrenadas para proteger la vida, preservar la propiedad y garantizar el derecho de las personas a manifestarse pacíficamente”, dijo el general a cargo de la Guardia Nacional de Minnesota, Jon Jensen.

 

Un equipo de CNN que transmitía las protestas fue arrestado por la policía en un operativo trasmitido en vivo, pero fue liberado más tarde. La cadena dijo que el gobernador Walz se había disculpado por lo ocurrido luego de emitir un comunicado condenando el comportamiento de los uniformados.

 

 “Arden redes sociales”

 

Las emociones han pasado las fronteras de Estados Unidos con llamados a la justicia para George Floyd que se han multiplicado en las redes sociales de varios países.

 

El caso evoca el de Eric Garner, un negro que falleció en 2014 en la ciudad de Nueva York después de haber sido asfixiado durante su detención por agentes de policía blancos.

 

“Ya es suficiente”, dijo el viernes su madre, Gwen Carr, en la ciudad de Nueva York. “Tienen que dejar de venir a nuestros vecindarios y aterrorizar y matar a nuestros jóvenes”.

 

PAL