Tras el asesinato de un juez federal, el presidente Andrés Manuel López Obrador consideró que su Gobierno no cederá ante intimidaciones o amenazas del crimen organizado.
Durante su conferencia mañanera, desde Puebla, el mandatario envío sus condolencias a los familiares del Uriel Villegas, quien fue asesinado junto a su esposa ayer en Colima.
Ante esos hechos, López Obrador señaló que “la intimidación no procede, porque nosotros tenemos como encomienda, mandato, el garantizar la paz y la tranquilidad en el país, y no vamos nosotros a ceder ante ninguna amenaza, ninguna intimidación, nada nos va a detener para limpiar de corrupción el país, que haya justicia y se garantice la paz”.
El mandatario dijo que ya existe coordinación con la Fiscalía General de la República (FGR) y prometió que no habrá impunidad para esclarecer el asesinato del juez.
Por su parte, la titular de la Secretaría de Gobernación (Segob), Olga Sánchez Cordero, indicó que el juez murió “por hacer su trabajo, tenía juicios de la delincuencia organizada, es muy lastimoso, para mí ha sido sumamente triste”.
PAL