Más de 2 mil personas fueron evacuadas de tres grandes incendios forestales en Arizona el jueves cuando las condiciones secas y los fuertes vientos azotaron las llamas en el suroeste de los Estados Unidos.
Más de mil 500 residentes huyeron de pequeñas comunidades en las montañas, a unas 50 millas (80 km) al noreste de Phoenix, Arizona, a medida que un incendio forestal se extendió a un área más grande que la ciudad de Detroit durante la noche, informaron los bomberos.
Los bomberos que lucharon contra el incendio de Bush se enfrentaron a fuertes vientos, baja humedad relativa y temperaturas de tres dígitos mientras las llamas saltaban a través del pino piñon y el enebro en el Bosque Nacional de Tonto.
El incendio, que comenzó con el incendio de un vehículo, fue el más grande de 37 incendios en los Estados Unidos con 114 mil 941 acres (46 mil 515 hectáreas) y ya el séptimo más grande en la historia de Arizona, de acuerdo con el Centro Nacional Interagencial de Bomberos (NIFC) y el Servicio Meteorológico Nacional. (NWS) datos.
“Nos acercamos a temperaturas más altas”, dijo Marvin Percha, meteorólogo del Servicio Meteorológico Nacional en Phoenix, que pronosticó temperaturas superiores a la media de 110 grados Fahrenheit (43 grados Celsius) el lunes.
Alrededor de una docena de otros incendios ardieron en Arizona cuando enfrentaba otro aumento diario récord en casos de coronavirus el jueves.
El incendio Mangum había ennegrecido 56 mil 780 acres (22 mil 980 hectáreas) a unas 40 millas (65 km) al norte del Gran Cañón, lo que obligó a 230 personas a abandonar sus hogares. Cuatrocientas casas fueron evacuadas por el incendio de Bighorn al norte de Tucson, que había quemado 23 mil 892 acres (9 mil 669 hectáreas).
Hacia el oeste, gran parte de California permaneció bajo una “advertencia de bandera roja” por vientos racheados erráticos, alrededor de media docena de pequeños incendios que incendiaron el estado.
Alaska reportó docenas de pequeñas llamas y el uso de perros para proteger a los bomberos de los osos. Los Karelian Bear Dogs, una raza finlandesa conocida por su naturaleza intrépida, fueron trasladados en avión a un campamento de extinción de incendios para proteger al personal y los suministros de los animales intrusos, según las autoridades de bomberos.
EFVE