Los jefes de Google y Apple están “decepcionados” y el de Microsoft considera que este “no es el momento”. La suspensión de las principales visas de trabajo decidida por el presidente de Estados Unidos desespera a las startups y a los gigantes tecnológicos, que temen que afecte la innovación y el progreso estadounidenses.
Donald Trump, que busca la reelección en noviembre, anunció el lunes la suspensión de las Green Card (para residencia permanente) y algunas visas de trabajo, incluidas las H-1B, ampliamente utilizadas en el sector de altas tecnologías.
“La inmigración ha contribuido enormemente al éxito económico de Estados Unidos”, reaccionó en Twitter el jefe de Alphabet (Google), Sundar Pichai, nacido en India.
Silicon Valley, la cuna de startups y unicornios que se han convertido en líderes mundiales, depende en gran medida de inmigrantes calificados para satisfacer la gran demanda de ingenieros, especialistas en datos, desarrolladores informáticos, etcétera.
Trump asegura querer ayudar a los trabajadores estadounidenses, enfrentados a un fuerte aumento del desempleo (13,3% de la población activa en mayo contra 3,5% en febrero) vinculado a la pandemia.
Pero el endurecimiento de la política migratoria “impedirá a las empresas estadounidenses, del sector tecnológico y de otros, que contraten a los hombres y mujeres que necesitan para reforzar su personal, relanzar la economía e impulsar la innovación”, se indignó Jason Oxman, presidente del Information Technology Industry Council, una asociación profesional que reúne a más de 70 empresas, incluidas Apple, Amazon, Google, Facebook y Microsoft.
“En un momento crítico para la economía de Estados Unidos, esto tendrá un impacto en la recuperación y el crecimiento en los próximos años”, sostuvo.
Decisión “política”
Las visas H-1B se otorgan cada año a 85.000 personas. El decreto firmado el lunes también pone en pausa las visas L, utilizadas por las multinacionales para transferir a sus propios empleados; la mayoría de las visas J, utilizadas por estudiantes investigadores; y otras visas de trabajo.
Según un alto funcionario, esta “pausa” impedirá el arribo de al menos 525.000 extranjeros.
Es una decisión “principalmente política”, señala Darrell West, director del centro de innovación tecnológica de la Brookings Institution.
Trump se ha enzarzado con el sector tecnológico en varios frentes, incluida la regulación de grandes plataformas, que a juicio del mandatario buscan perjudicarlo, a pesar de su frenético uso de las redes sociales.
“El decreto es contraproducente porque las empresas del sector tecnológico, pero también de la agricultura, la restauración y el turismo, tendrán dificultades para encontrar los empleados que necesitan”, dijo West.
El alto funcionario enfatizó que la suspensión de las visas H-1B era temporal y que la administración prepararía una reforma para que en 2021 se asignen a los extranjeros más calificados y no por lotería.
“Esto eliminará la competencia para los estadounidenses en puestos debutantes y nos ayudará a atraer a los mejores, los más talentosos”, estimó.
Pero según un estudio reciente de la Universidad de Georgetown, Estados Unidos ya intenta atraer a su territorio ingenieros internacionales calificados en áreas clave, como la inteligencia artificial.
Si el país no flexibiliza sus reglas de inmigración, “las universidades y los empleadores extranjeros podrían comenzar a cazar furtivamente a los estadounidenses”, dicen los investigadores.
Decepción
Muchos líderes, grupos y subsidiarias de Silicon Valley son de origen inmigrante y no han tardado en recordarlo en Twitter.
“La inmigración ocupa un lugar central en la historia de Estados Unidos y en mi historia personal”, dijo Susan Wojcicki, directora ejecutiva de YouTube, subsidiaria de Google, e hija de un inmigrante polaco.
Elon Musk escribió que no estaba “en absoluto de acuerdo” con la decisión presidencial.
“En mi experiencia, estas competencias (tecnológicas) crean empleos. Reformar el sistema de visas tiene sentido, pero esto va demasiado lejos”, agregó el jefe de Tesla, nacido en Sudáfrica.
Brad Smith, presidente de Microsoft, tuiteó: “Ahora no es el momento de aislar a nuestro país del talento internacional o de crear incertidumbre o ansiedad”.
“Al igual que Apple, esta nación de inmigrantes siempre ha sacado fuerza de la diversidad y la esperanza de la promesa duradera del sueño americano”, dijo Tim Cook, director ejecutivo de la firma creadora del iPhone. “No hay nueva prosperidad sin estos dos elementos. (Estoy) profundamente decepcionado por esta decisión”.
cs