El polvo del Sahara que ha comenzado a ingresar a la Península de Yucatán, sí afecta a la salud e incrementa la mortalidad en personas con enfermedades respiratorias y cardíacas crónicas, informó el subsecretario de prevención y promoción de la salud, Hugo López-Gatell.
Explicó que las partículas de arena que se propagan desde el desierto del Sahara en África, tienen un tamaño de entre 2.5 y 10 micras que son las partículas respirables, “pueden entrar por nariz y boca al momento de respirar y alojarse en la traquea, en los bronquios o llegar incluso las de menor tamaño de 2.5 hasta las terminales,los bronquiolos y los alvéolos en los pulmones.
Pueden incrementar la mortalidad en general en personas que padecen enfermedades respiratorias crónicas y enfermedades cardíacas crónicas”.
De esa manera, dijo que se debe tener un mayor cuidado para aquellas personas que padecen la Enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), bronquitis crónica, enfisema y asma, pues al respirar dichas partículas, “pueden precipitar exacerbaciones o complicaciones de estas enfermedades y pueden aumentar la mortalidad”.
Ante ello, recomendó quedarse en casa, mantener cerradas las ventanas y tener una baja actividad física para evitar que con la inspiración intensa se incorporen una mayor cantidad de partículas.
Señaló que el cubre bocas no es tan efectivo para inhibirlas partículas del Sahara; no obstante, aclaró que un cubrebocas del tipo N95 sí podría ser efectivo para reducir su aspiración.
fahl