Luego de que Beatriz Gutiérrez Müller fuera increpada por un ciudadano durante un vuelo comercial, el presidente Andrés Manuel López Obrador aclaró que no tendrá seguridad especial y consideró que es una cuota que se tiene que pagar por encabezar una transformación.
Durante su conferencia mañanera, el mandatario reconoció la tranquilidad con que actuó su esposa y manifestó que durante una llamada telefónica le confesó que “sentía que si le respondía algo lo iba a golpear”.
El Presidente consideró que el ciudadano que increpó a su esposa, identificado como simpatizante del PAN, mostró una actitud reaccionaria, iracunda, “muy característica del conservadurismo y fanatismo”.
Abundó que “Beatriz es una persona con criterio, inteligencia y convicciones y sabe que tenemos que aceptar estas actitudes y no caer en provocaciones”.
Pidió a la ciudadanía serenarse porque no se cambiará la forma de gobernar; “imagínense que diga yo: ya no sigo adelante porque me acosan y me da miedo”, dijo.
ica