El máximo tribunal de Venezuela, de línea oficialista, suspendió este martes la directiva del partido político de Juan Guaidó, Voluntad Popular, y entregó su control a un rival; decisión calificada de “írrita” por la oficina del líder opositor.

 

Una sentencia de la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) “decretó medida cautelar de tutela constitucional consistente en suspender la actual Dirección Nacional de la organización con fines políticos Voluntad Popular”, indica un comunicado de la corte.

 

El alto tribunal nombró a la vez una “junta directiva ad hoc” en el partido, encabezada por el diputado José Gregorio Noriega, adversario de Guaidó, jefe parlamentario reconocido como presidente encargado del país caribeño por medio centenar de gobiernos.

 

Ya el TSJ, el 15 y el 16 de junio pasados, tomó medidas similares contra otros dos de los principales partidos opositores, Acción Democrática (socialdemócrata) y Primero Justicia (centro).

 

Ello en camino a las elecciones del próximo 6 de diciembre para renovar el Parlamento, único poder controlado por la oposición en Venezuela, contra las cuales los principales partidos que adversan al gobierno socialista de Nicolás Maduro han anunciado un boicot.

 

Calificando al TSJ de “brazo judicial de la dictadura de Maduro”, la oficina de Guaidó rechazó en Twitter “una írrita decisión” y acusó al chavismo de pretender “apoderarse de la tarjeta, logos y símbolos de Voluntad Popular” a fin de “simular una falsa oposición para su próxima trampa electoral”.

 

La directiva ad hoc, según el fallo judicial, “podrá utilizar la tarjeta electoral, el logo, símbolos, emblemas, colores y cualquier otro concepto propio de Voluntad Popular”, partido fundado por el dirigente opositor Leopoldo López, mentor de Guaidó.

 

Desde la jefatura de la unicameral Asamblea Nacional, Guaidó reclamó la presidencia interina de Venezuela en enero de 2019 con respaldo de Estados Unidos, después de que la mayoría opositora de la cámara declarara “usurpador” a Maduro acusándole de haber sido reelegido fraudulentamente.

 

“Traidores”

Noriega es aliado de Luis Parra, un legislador que rompió con Guaidó después de haber sido acusado de corrupción vinculada con un programa de alimentación del gobierno de Maduro y que se proclamó presidente del congreso en enero pasado, con apoyo del chavismo, en paralelo a la reelección del líder opositor.

 

“A Voluntad Popular no la definen unos traidores”, dijo en Twitter López, quien se encuentra en calidad de huésped en la residencia del embajador de España en Caracas desde que huyó de su arresto domiciliario el 30 de abril de 2019 durante un fallido alzamiento de un grupo de militares en Caracas.

 

Washington emitió sanciones financieras contra Parra y varios de los congresistas que le apoyan, entre ellos Noriega.

 

“Hoy ratificamos claramente: Voluntad Popular NO CONVALIDARÁ la farsa electoral”, continuó López, condenado a 13 años y 9 meses de prisión en 2015, acusado de “incitación a la violencia” en protestas que dejaron 43 muertos un año antes. Estuvo en una cárcel militar hasta 2017.

 

Once partidos opositores, incluyendo Voluntad Popular, Acción Democrática y Primero Justicia, anunciaron un boicot contra las votaciones legislativas luego de la designación de una nueva directiva del Consejo Nacional Electoral (CNE) por parte del TSJ, que declaró una “omisión” del Parlamento en su atribución de escoger autoridades comiciales.

 

PAL