Defensores de derechos humanos alertaron este jueves de un grave riesgo de propagación de la Covid-19 en dos centros de detención de migrantes en Panamá, donde dijeron que las personas viven hacinadas y sin condiciones adecuadas de higiene.
Representantes del Centro para la Justicia y el Derecho Internacional (Cejil) alertaron de la preocupante situación que se vive en los centros para migrantes de La Peñita y Lajas Blancas, en la provincia panameña de Darién, fronteriza con Colombia.
“Hemos reiterado que en el contexto de la pandemia se ha generado riesgo general y grave para 1700 personas detenidas”, declaró la abogada Kavita Kapur, de Cejil, en una audiencia virtual ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CorteIDH).
Agregó que desde abril se han detectado más de 200 casos de covid-19 en los campamentos, incluyendo siete niños.
La CorteIDH, con sede en San José, convocó la audiencia para revisar el cumplimiento de una orden emitida en mayo para que Panamá mejore las condiciones y reduzca el hacinamiento en los dos campamentos.
Representantes del gobierno panameño argumentaron que han tomado acciones para reducir el hacinamiento y garantizar la atención a los migrantes procedentes de países africanos, Haití, Cuba y Venezuela, quienes buscan llegar a Estados Unidos o Canadá.
La defensora del pueblo de Panamá, Maribel Coco de Garibaldi, recordó que la atención se dificultó desde que en marzo Costa Rica cerró sus fronteras, obligando a los migrantes a permanecer en el país canalero.
Panamá es también el país más golpeado de Centroamérica por el nuevo coronavirus, con más de 800 muertos hasta este jueves.
Citando datos de la Organización Internacional de las Migraciones (OIM), Kapur indicó que al 25 de junio La Peñita tenía 1.624 migrantes, cuando su capacidad es para 200.
“Con eso es imposible mantener medidas de distanciamiento y las personas están expuestas al contagio” de covid-19, agregó la abogada de Cejil, quien alertó de un faltante de 80% de letrinas y 90% de duchas.
El vicecanciller panameño, Federico Alfaro, urgió una acción regional para atender a los migrantes.
A su vez, el viceministro de Seguridad, Ivor Pitti, detalló inversiones para mejorar las condiciones de Lajas Blancas, donde son trasladados contagiados y sospechosos de covid-19.
También destacó que se prevé una nueva estación migratoria para recibir a 1.200 personas.
La viceministra de Salud, Ivette Berrio, aseguró que a los migrantes se les brinda “la misma atención que se le da a cualquier habitante de Panamá”.
DAMG