El Gobierno del presidente Donald Trump propuso el viernes aprobar un permiso clave para construir una mina de cobre y oro en Alaska que el expresidente Barack Obama intentó bloquear por preocupaciones ambientales.
El Cuerpo de Ingenieros del Ejército de Estados Unidos emitió una declaración final sobre el impacto ambiental en la mina Pebble, que permitiría la construcción de la instalación y sus desarrollos asociados, incluido un sistema de carreteras de 132 kilómetros.
Esto allana el camino para una decisión final en tan solo 30 días sobre el proyecto, que es propiedad de la canadiense Northern Dynasty Minerals.
Durante el gobierno de Obama, el proyecto afrontó la oposición de la industria pesquera. El mandatario demócrata trató de evitar la concesión de permisos para la construcción de Pebble después de que un estudio concluyó que la mina dañaría irreparablemente el hábitat rico en salmón y a las personas y la vida silvestre que dependen de él.
Las organizaciones nativas que poseen tierras a lo largo de la ruta planeada han prometido evitar que Pebble las use, lo que podría hacer que el proyecto se vea inmerso en gran cantidad de disputas legales.
ica