Aunque el pasado lunes rechazó subirse al avión presidencial, el Presidente Andrés Manuel López Obrador confesó que sí se quedó con las ganas, pero sólo de tomarse una foto al lado de él para demostrar que es un lujo para pequeños faraones.
“Yo nada más me quedé con las ganas de tomarme una foto en el avión presidencial, ¿y saben para qué quería tomarme la foto? Para que me viera yo así, pequeñito, porque eso es para pequeños faraones.
“Aunque dicen que la grandez de los hombres y las mujeres se mide de la cabeza al cielo no del suelo a la cabeza”.
Durante el lunes pasado que el mandatario realizó La Mañanera en el hangar presidencial, sí tuvo una imagen con el avión, pues sus fotógrafos oficiales lo captaron pasando frente a la aeronave para tomar su lugar en el atril, en donde se le ve pequeñito.
MGL