Para la familia Martínez mayo fue un mes doblemente doloroso. Don Nicolás agravó por diabetes y su hijo fue internado derivado de la pandemia de Covid-19; ambos fallecieron.
Clara Martínez, comentó que en el caso de su abuelo, don Nico, fue llevado al hospital Enrique Cabrera y lo remitieron a un nosocomio en las inmediaciones de Tepito, donde fue internado por dos días y lo dieron de alta.
En el transcurso de la semana, en su domicilio, registró nuevamente problemas de glucosa, “mi tía nos dijo que le estaba dando un infarto”.
Expresó que llegó la Policía, la cual dio aviso a los servicios de emergencia, éstos confirmaron el deceso… y les dieron la instrucción de que tenían que llevarlo a incinerar, por el Covid-19.
La joven dijo a 24 HORAS que ya en el crematorio había mucha gente y la mayoría eran decesos ocasionados por el virus, tuvieron que esperar varias horas en su carro, porque estaba lloviendo para entregarles la urna con las cenizas.
En el caso del hijo de don Nico –quien lleva el mismo nombre–, Clara refirió que en su domicilio su tío empezó a tener síntomas de asfixia y llamaron a una ambulancia que lo trasladó al Enrique Cabrera.
En el hospital le diagnosticaron neumonía atípica. Detalla que estuvieron cerca de 16 horas a las afueras del nosocomio sin tener noticias.
“Al insistir en informes nos dijeron que podíamos retirarnos… unas horas después recibimos una llamada por parte del hospital para decir que acudiéramos; al llegar pidieron que un familiar ingresara y a mi mamá la vistieron con el traje Covid”.
Clara relató que no sabían que su tío había fallecido… “Mi mamá ingresa y el doctor le dice que debía reconocer el cuerpo… a lo que ella dijo que no le habían informado y no alcanzaba a ver su rostro, entonces lo acomodaron… y sí era mi tío. También fue incinerado”.
LEG