Foto: Reuters Los frascos se venden por 5 euros cada uno y parte del dinero se destina a una organización benéfica para mejorar las condiciones de vida de los animales en cautiverio  

Los excrementos de una criatura pueden ser el tesoro de otra, descubrió el Circo Krone de Alemania durante la pandemia del nuevo Coronavirus.

Hogar de 26 leones y tigres, el circo ha encontrado un ingreso adicional inesperado y recaudado dinero pese a las restricciones relacionadas con el Coronavirus: vender frascos de excrementos de grandes felinos.

Los clientes le han dicho al domador de leones Martin Lacey que confiaban en el material para mantener alejados a otros animales.

“Me dijeron que mantiene a los gatos alejados del jardín y desde entonces hemos descubierto que también mantiene a los animales alejados del coche, donde se comen todos los cables eléctricos”, dijo Lacey.

La tienda emergente del circo también es una forma de hacer reír a la gente, dice Lacey mientras el circo espera que se le permita actuar de nuevo.

Los frascos se venden por 5 euros cada uno y parte del dinero se destina a una organización benéfica para mejorar las condiciones de vida de los animales en cautiverio.

¿Y si no tienes un problema de plagas en el jardín, pero encuentras molestos a tus vecinos? “Pon un poco en el jardín y los vecinos se irán”, bromeó Lacey.

 

 

AR