Mientras la economía global sufre una desaceleración debido al impacto de la pandemia de Covid-19, los centros de datos y las soluciones en la nube adquirieron un rol protagónico al proveer a la sociedad y a las industrias, de forma acelerada, la infraestructura digital y el desarrollo necesarios para los nuevos hábitos de consumo digital.
Gracias a los data centers, diversas operaciones se pueden realizar a diario a través de la web y han dado lugar a que el teletrabajo, la educación en línea, e-commerce y la comunicación vía remota sean ya parte esencial de nuestro día a día; además, brindan un potente respaldo para las actividades de misión crítica de las empresas, así como la capacidad de operar, proteger y recuperar los sistemas en cualquier momento, sin importar de lo que suceda a lo externo.
Cabe señalar que en un data center se concentran los recursos necesarios de computación de una organización o de un proveedor de servicios; es decir, es la columna en la transformación digital del mundo e incontables usuarios y empresas dependen de la información almacenada ahí, sobre todo en momentos de alta demanda como sucede en esta “nueva normalidad”.
En el caso de las industrias, aquellas que han recurrido la adopción de la nube y los servicios de centros de datos, han sufrido menos estragos en el escenario actual, pues representan herramientas vitales para habilitar el home office y la colaboración a distancia, garantizar la seguridad de los datos y la información, y soportar el aumento exponencial en el tráfico de internet.
Por su parte, Statista calcula que para 2023, el crecimiento de los centros de datos es tan acelerado que para ese año los ingresos de este sector alcancen más de mil millones de dólares por año, en gran medida, por su eficiencia para asegurar estabilidad y continuidad en sus operaciones, además de seguridad, disponibilidad y accesibilidad de la información en cualquier momento.
Para el futuro próximo, los centros de procesamiento de datos seguirán jugando un papel imprescindible para ayudar a los negocios a continuar creciendo y funcionando frente a cualquier eventualidad en el futuro, aun en momentos de incertidumbre como los que hoy vivimos por crisis sanitaria por el nuevo coronavirus SARS-CoV-2.
Asimismo, en la era post Covid-19, los data centers pueden representar una ventaja competitiva para cualquier organización al estar mejor preparadas para enfrentar un futuro totalmente digital y así responder a cambios inmediatos con soluciones innovadoras y eficientes. En el mercado actual, empresas como ABB, Siemens y Qualisys ofrecen diversas soluciones para conseguir una escalabilidad total y ahorros de espacio, tiempo, energía y costos.
Aunque la demanda por nuevas instalaciones e infraestructura no ha experimentado rezagos hasta ahora, las industrias del data center y el cloud computing enfrentan otro desafío: el de construir nuevos centros de datos lo suficientemente rápido para satisfacer la creciente demanda provocada por la transformación digital de la economía global.
DAMG