Pocas veces se ha visto que un paquete haya sido recibido con una ceremonia casi de Jefe de Estado.

Para recibir las 3 mil dosis de la vacuna de Pfizer contra el Covid-19, casi medio gabinete acudió al aeropuerto de la Ciudad de México.

Después el recorrido por media ciudad de un convoy militar para depositar en un cuartel la vacuna, a la que acompañaron decenas de fotógrafos y camarógrafos; el show en el peor sentido de la palabra.

Lo destacable es que la vacuna, aunque muy poquita, ya está en el país.

No fueron las 270 mil dosis, mucho menos el millón 417 mil 659 que según el líder de Morena, Mario Delgado, llegarían ayer -nadie sabe de dónde sacó esa cifra-.

El secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, festejó jubiloso la llegada del cargamento.

“Es el principio del fin’’, dijo, aunque el fin se ve aún lejos, por lo menos dos años adelante.

Pero algo había que festejar, que el Gobierno hizo su trabajo.

Nunca como ahora todo el país desea que la vacuna sea la solución y que no se convierta en problema ni su distribución ni su aplicación y mucho menos que se politice y condicione.

Veremos.

****

El presidente López Obrador encontró el discurso necesario para descalificar la coalición entre el PRI, PAN y PRD: vienen a arrebatarles el dinero de los programas sociales.

Y ya se sabe que si algo defiende un buen mexicano, es la cartera.

Así que no será nada raro escuchar de aquí a julio, si el obsequioso Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación lo permite, la advertencia presidencial sobre el peligro que corre el dinero de los programas sociales.

Por supuesto que ese no es el fin de la alianza, que criticada y todo, parece que sí le movió el tapete al inquilino de Palacio Nacional y a su partido, que por cierto también concretará una alianza con el Verde y el Partido del Trabajo.

Pero esa ya tiene la bendición de ya saben quién.

****

Por cierto, se dice que más de 400 de los 500 diputados federales, de mayoría y de representación proporcional, buscan su reelección.

¿Entonces para qué tantas alianzas y todo el circo mediático si solo habrá 100 lugares disponibles para competir?

La joya de la corona es desde luego la mayoría de la Cámara de Diputados; incluso algunos partidos la ponen por encima de ganar las gubernaturas (15 estarán en disputa).

Quién sabe cuántos de los diputados podrán lograr la reelección porque así que digamos ¡qué trabajazo! hicieron pues como que no, sobre todo por la aprobación de leyes y reformas que dividieron al país en buenos y malos.

Ya veremos si los partidos le apuestan a cartas muy vistas o si refrescan sus bancadas con sangre nueva.

****

Por lo menos desde marzo pasado Olga Sánchez Cordero y desde septiembre Arturo Herrera, habían sido candidateados a salir del gabinete presidencial.

A punto de cerrar el año, sus malquerientes deben estar haciendo coraje no solo porque no se cumplieron sus expectativas sino que, por el contrario, siguen firmes en la formación del presidente López Obrador.

Como ocurre cada principio de año correrán nuevas apuestas sobre eventuales cambios en el gabinete; si los hay, que no parece, no sería para competir por un puesto de elección popular, pues los plazos se vencieron.

Así que ambos funcionarios sí cargaron a los peregrinos.

*****

Ha sido un año particularmente complicado para todos. Por eso valoramos más que nunca su compañía y lectura. Que el próximo año sea mejor para todos.

Nos leemos en enero. Cuídese.

LEG