Que no lo engañen o como dicen en mi querida Zacatecas, que no lo hagan tonto señor Presidente. Ese es el llamado que le hace un minero con varias décadas de experiencia trabajando directamente en las minas, y es que está en sus manos el dejar de creer mentiras y darle justicia a los mineros de Cosalá en Sinaloa.

 

Hago este llamado al Presidente López Obrador, ya que se está haciendo costumbre en sus conferencias mañaneras dar el micrófono a “reporteros” que se dedican solo a tomarle el pelo, me refiero al tema de la mina San Rafael de Cosalá. En dos ocasiones le han dado datos falsos, le han contado cuentos chinos y usted parece creerlo todo.

 

“Reporteros” que aparecen con el fin de subir el tema a la agenda pública para verle la cara frente a todos o bien para, espero no, entrar en un juego de completa simulación, en donde usted esté de acuerdo en jugar ese papel.

 

Presidente, le hablan de una votación en donde supuestamente los trabajadores eligieron al Sindicato de Napoleón Gómez Urrutia para ser representados, pero lo que no le dicen es que se trata de unas elecciones burdas, carentes de seguridad y por supuesto de democracia, gran parte de la base fue amenazada por el crimen organizado para votar en favor de ese sindicato. Tampoco le dicen que esa votación está en litigio y fue impugnada por los propios mineros y la empresa quienes denunciaron los abusos.

 

Le cuentan que la mina está en paro y que el control lo tienen malandros ligados a políticos y sindicatos, sin embargo, todos saben, menos usted, que la mina está tomada desde el 25 de enero por Napoleón Gómez Urrutia. Que esa mina es custodiada por hombres armados que obedecen órdenes sólo de Napito y de nadie más.

 

Tampoco le dicen que este personaje no es la víctima sino es el victimario, que pidió a la empresa millones de dólares a cambio de levantar el paro.

 

Señor Presidente, celebro que escuche de buena fe, pero como representantes del pueblo de México nos toca investigar de fondo cada hecho y no solo guiarnos de dichos.

 

Como diputado federal y líder sindical, le ofrezco mi intervención para que usted conozca de fondo el tema, para que la Secretaria del Trabajo, Luisa María Alcalde, le muestre las impugnaciones que hay de esa votación, a la que de bote pronto usted calificó de legítima y democrática.

 

Le brindo además mi apoyo para que conozca las denuncias y quejas que aún recaen sobre Napoleón Gómez Urrutia por el desfalco de 55 millones de dólares en detrimento de los mineros, dicho sea de paso, muchos de ellos ya de la tercera edad.

 

Hagamos justicia en estos temas señor Presidente. En Cosalá está en juego el empleo de cientos de familias que esperan que usted intervenga para bien y regrese la paz y el empleo a esa población, pero no bajo el yugo de Napito que los tiene sometidos con el poder del crimen organizado.

 

A la sociedad le ha quedado claro que a usted le hace más daño apoyar a Napito que defenderlo. No hay día que en las “benditas redes sociales” no lo vinculen con él calificándolo de corrupto.

 

Por el bien de los mineros eche mano de las dependencias federales y conozca más del caso, no permita que Cosalá se convierta en la próxima Cananea, Taxco o Sombrerete, minas que Napito dejó en paro por más de una década.

 

México enfrentará este 2021 elecciones, por ello su Gobierno debe garantizar que cada votación, cada recuento sea realmente limpio, libre y democrático, ya que de permitir abusos y violaciones denunciadas ante la autoridad se correría el riesgo de que se pensara que esa será la línea a seguir en los próximos comicios electorales.

 

                                                                                                                                          @CarlosPavonC