La Banca mejoró algunos números al cierre de noviembre de 2020, aunque todavía dentro del período en donde siguen con la flexibilidad en la regulación de la CNBV y del Banxico que terminará en este primer trimestre de 2021.

La Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV), decidió implementar cuatro nuevas medidas:

a) Computar un monto menor de reservas específicas cuando se pacte una reestructura con el cliente.

b) Reconocimiento de las reservas específicas que se liberen por la reestructura de un crédito como reservas adicionales.

c) Podrán reconocer un mayor capital regulatorio al considerar las reservas adicionales como parte del capital complementario.

d) Reducir prudentemente los requerimientos de capital por riesgo de crédito.

Así, tenemos que:

1.- Los Activos Totales de la banca crecieron 12.3% anual, donde BBVA y Santander destacaron.

2.- En Inversión en Valores, se incrementó un 19.2% anual, destacando Santander, BBVA y Citibanamex.

3.- Respecto a la Captación Total, se registró un aumento anual de 10.8%, destacando BBVA, Citibanamex, Santander y Banorte.

4.- En cuanto al Capital Contable, el sistema creció 8.9%, destacando BBVA, Santander, Citibanamex y Banorte.

5.- En relación al Resultado Neto, el aumento en el nivel de reservas preventivas generó un crecimiento negativo vs noviembre 2019 un 34.3%. En este rubro, Santander e Inbursa fueron de los grandes bancos, los que menor ajuste tuvieron.

6.- En cuanto al índice de Morosidad, el sistema aumentó de 2.13 a 2.46% en noviembre 2020. Banorte registra 1.04%, Inbursa 2.11%, por debajo del promedio del sistema, mientras que Citibanamex registra 2.55% y BBVA 2.80% y Santander 2.83%.

7.- Sobre el índice de Capitalización, el índice se mantiene arriba de 17% (dato a octubre). Destaca Banorte con un 21.12% y en menor medida HSBC 14.49%. BBVA, Santander y Citibanamex están dentro de este rango.

Relevo en el Notariado Mexicano

El Colegio Nacional del Notariado Mexicano está de plácemes ya que en este mes, se realiza el relevo de su presidencia con la llegada de Guillermo Escamilla Narváez, notario 243 de la Ciudad de México, quien tiene una larga trayectoria gremial, amplio conocimiento técnico y buena relación con la clase política.

Escamilla Narváez llega después de un periodo de dos años al mando de Armando Prado, que se caracterizó por una gestión poco dinámica, en el que muchas de las iniciativas que habían decidido llevar a cabo para acercar al notariado a las personas comunes y corrientes (quienes al fin y al cabo somos los usuarios de sus servicios), se fueron al olvido. Afectó la pandemia, pero no se buscó reaccionar con procesos innovadores de comunicación.

El reto para el nuevo presidente del Colegio Nacional es grande, ya que la actividad notarial también se ha visto afectada durante este período del Covid y los cierres parciales de actividades, porque además, se crearon menos empresas, se otorgaron menos testamentos y se realizaron menos compraventa de inmuebles. Además, como en otros sectores, la pandemia ha dejado clara la necesidad de digitalizar una buena parte de los servicios notariales, para lo que este sector había mostrado resistencia.

                                                                                                                   @1ahuerta