El diputado federal Alfonso Ramírez Cuéllar (Morena), propuso, debido a los graves retos en salud y económicos del país por la pandemia, establecer, por única vez, un impuesto a las grandes fortunas, concretamente a quienes posean más de un millón de dólares, con lo que podrían recaudarse hasta 100 mil millones de pesos.
A través de un comunicado, el legislador planteó que el encuentro entre el presidente de Argentina, Alberto Fernández, y el mandatario mexicano, Andrés Manuel López Obrador, constituye un buen momento para hacer el planteamiento, pues en el país sudamericano se impulsó una medida similar.
Ramírez Cuéllar expresó que habría que evaluar el impacto y las bondades del “Aporte Solidario y Extraordinario de las grandes fortunas” establecido recientemente en Argentina para que las grandes fortunas colaboren en el fortalecimiento financiero que permita ayudar a enfrentar los estragos de la pandemia.
En Argentina, explicó, este aporte solidario aplicado desde diciembre pasado, permitirá la imposición de un impuesto único sobre la riqueza a los patrimonios mayores a 2.5 millones de dólares para mitigar el impacto económico de la pandemia.
“Los y las contribuyentes, que se calculan en tan sólo un 0.02% de la población, aportarán bajo tasas progresivas moderadas entre 2% y 3.5% aplicadas a su patrimonio neto.
“Con esta medida, el gobierno argentino estima recaudar aproximadamente 3.5 mil millones de dólares, el equivalente a 0.7% del PIB de ese país”, detalló el legislador.
Agregó que otras naciones, entre ellas Inglaterra, Sudáfrica y Perú están discutiendo la introducción de un aporte extraordinario similar.
“Necesitamos fortalecer la capacidad de gasto en tiempos de crisis mediante este tipo de aportaciones extraordinarias. En otros países ya se han implementado medidas similares; por ejemplo, Irlanda hizo uso de este instrumento tras la crisis financiera del 2008, y Ecuador aplicó temporalmente un impuesto a patrimonios superiores a un millón de dólares para cubrir los gastos de reconstrucción después del terremoto de 2015”, afirmó el diputado.
Indicó que aplicado en México, un impuesto único semejante ayudaría a aliviar la presión sobre los gastos relacionados a la pandemia de manera significativa.
El diputado se refirió a un estudio de La Red Latinoamericana por Justicia Económica y Social, citado por FUNDAR, donde establece que un impuesto a las grandes fortunas con una tasa del 2% para patrimonios entre 20 millones y 1000 millones de pesos, de 3% para patrimonios entre mil millones y 2 mil millones de pesos, y una tasa máxima del 3.5% aplicable a patrimonios mayores a 2 mil millones de pesos pudiera recaudar cerca de 100 mil millones de pesos.
Este impuesto, expuso, solo afectaría a aproximadamente 173 mil personas que se encuentran en esta condición en México, es decir, el 0.13% de la población.
Otro estudio del Centro Estratégico Latinoamericano de Geopolítica (CELAG) estima que un aporte único aplicado solamente a las personas con un patrimonio mayor a 20 mil millones de pesos, con una tasa del 2.5%, afectando únicamente a 12 patrimonios, podría recaudar cerca de 50 mil millones de pesos.
Ramírez Cuéllar destacó que, como en el caso argentino, estos ingresos deberían etiquetarse para que su uso sea transparente. “Debemos avanzar hacia un sistema fiscal que permita la etiquetación de una parte de los impuestos que obtiene el Estado, lo que brindaría mayor certeza a la población sobre el uso de los recursos públicos y disminuiría su renuencia a realizar las contribuciones”, dijo el diputado. Específicamente, para el caso de este impuesto a las grandes fortunas, se propone asegurar que lo obtenido se destine a la atención de pacientes Covid, lo que abarca insumos médicos y mejora de instalaciones hospitalarias; a la investigación médica, incluyendo equipamiento de laboratorios y recursos para el seguimiento en tiempo real a los casos, detalló.
Además, continuó Ramírez Cuéllar, es indispensable destinar una parte importante de los recursos a apoyar la recuperación de las pequeñas y medianas empresas.
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fahl