Emily era una bebé que a las pocas horas de haber nacido falleció en una clínica de Coacalco, Estado de México, por, según sus padres, negligencia médica.
La historia se remonta al pasado 11 de junio cuando Ricardo y Dulce acudieron a la Clínica Integral Materno Infantil, ubicada en el Eje 8, en el municipio referido, pues la mujer estaba en labor de parto.
En testimonios que han brindado a medios, los padres aseguran que antes de dar a luz, los estudios no mostraban algún signo de alarma y el nacimiento se dio de acuerdo a lo esperado.
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En un recuento que El Sol de Toluca realizó se específica que tras nacer, alrededor de las 11 de la mañana, la pequeña Emily fue llevada al área de cuneros. Poco después, a las 13:30, fue regresada con su madre para su primer alimento.
Alrededor de las 16:30 la bebé rechazó su segundo alimento, lo mismo pasó con el tercero, por lo que al lugar se presentó la pediatra con la ordenanza de cambiar la fórmula, lo cual tampoco funcionó.
Alrededor de las 10 de la noche Emily fue separada de su madre. Su padre relató al medio referido que su hija fue llevada a otro cuarto en donde había mangueras atoradas y no se contaba con el oxígeno y los medicamentos que la doctora solicitaba a las enfermeras.
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Tras el fallecimiento de la bebé, Ricardo denunció que se enfrentó la burocracia de la Fiscalía General del Estado de México pues viajó de Coacalco a Ecatepec y de allí a Tlalnepantla para tratar de dar con el Semefo donde se hallaba el cuerpo de la niña.
El cuerpo de Emily fue entregado a sus familiares varios días después de fallecer. En el Acta de Defunción la causa de la muerte se definió como “indeterminada”.
Hasta la fecha, nadie le ha dado un diagnóstico patológico a los padres para saber qué medicamentos y en qué cantidad le aplicaron a su hija.
La Clínica se encuentra actualmente “suspendida”.
FF